¡Ojo, papás! Son días de caries y kilos extras
| Autor | Vicente Guerrero |
Para los niños el periodo entre Navidad y Año Nuevo es mágico: estar de vacaciones, jugar con los regalos que llevó Santa Clos, comer dulces y galletas y dormir más de lo acostumbrado.
Pero para los papás de esos niños, ésta es una época de foquitos rojos y no precisamente los del arbolito de Navidad. En estos días dos fantasmas pueden hacer su aparición en sus pequeños: la caries y algunos kilitos de más.
Con los dientes lastimados
El azúcar que contienen los dulces, confites, colaciones y chocolates, típicos de las bolsitas navideñas, participan en la creación de ácidos que propician el surgimiento de bacterias que causan la caries y que causan que las visitas infantiles al consultorio dental, después de estas fechas, aumenten.
"Los papás se relajan mucho por la cuestión de las desveladas, están teniendo un poco más de desorden en casa, no le ponen atención al cepillado cuando deberían saber que los niños, al dormir más, tienen más tiempo su boca cerrada, lo que permite un fermento continuo de bacterias", explica el odontólogo Andrés González.
La caries dental es una enfermedad en los dientes consistente en una lesión que evoluciona desde el exterior hacia el interior y que desemboca en una pérdida de sustancia formando una cavidad.
"Estas bacterias, entre más tiempo estén en la boca, más potente es su acción, por lo que no hay que bajar la guardia en el cepillado", menciona.
En Estados Unidos está muy documentado el aumento de visitas al dentista en esta época -al igual que en Halloween y Pascua- por el incremento en la ingesta de golosinas, que se traduce en problemas de caries, afirma González.
En su consultorio, señala el especialista, tras estas fechas, la atención infantil se duplica de 5 a 10 consultas diarias.
Pero no sólo la caries es motivo de consulta, también la fractura de piezas dentales, ya que están al por mayor los caramelos y los chiclosos duros que se convierten en dulce atractivo para morder y morder sin cansancio.
"Los niños vienen a la consulta para atenderse mal olor, sensibilidad excesiva en las encías y fracturas; la caries surge por la falta de cepillado, ya que las bacterias encuentran entre las fisuras y surcos del diente, o en los empastes defectuosos, el lugar propicio para multiplicarse", indica.
Ante esa realidad, añade, no hay otro camino que el de la higiene bucal para toda la familia; todos los días, al terminar cada comida, por regla general se debe hacer el cepillado, y utilizar el...
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