Visión Económica/ Zigzagues del peso

AutorSalvador Kalifa

El peso mexicano se encuentra entre las monedas que más terreno han perdido en relación con el dólar durante este año, mientras que se aprecian otras menos sólidas como el peso argentino y el real brasileño. ¿Qué explica esta evolución y qué podemos esperar en el futuro próximo?

El peso fuerte hasta abril del 2002 se asoció, esencialmente, a una cuenta de capital muy favorable. Esto se debió al entusiasmo que mostraron los inversionistas por nuestro país, que generó entrada de inversión extranjera directa, más facilidades y mejores términos para la colocación de deuda mexicana gubernamental y privada, y un mayor flujo de capital de corto plazo.

Esta entrada de recursos superó el déficit de nuestra cuenta corriente durante 2001 y los primeros meses del año pasado, lo que facilitó la acumulación de reservas y la apreciación del peso.

La situación, sin embargo, cambió en abril de 2002 y desde entonces el peso se ha debilitado respecto al dólar. Las explicaciones incluyen la depreciación del dólar frente al euro y la inquietud política antes de las elecciones en Brasil en octubre pasado. Una de las causas más recientes es la incertidumbre en relación con la guerra entre Estados Unidos e Iraq.

Muchos esperan que una vez superado ese conflicto, el peso vuelva a fortalecerse. La expectativa es que la guerra terminará pronto y, en la medida que el dólar se aprecie frente al euro, ello también apuntalará al peso en relación con el dólar. Vale la pena aclarar que aún cuando una menor incertidumbre geopolítica ayudará a nuestra moneda, la "moda" de vincular sus movimientos respecto al dólar con los de éste frente al euro, no tiene bases que la sustenten en el largo plazo.

Me parece, además, que esta expectativa no le da la ponderación suficiente a los factores internos que también contribuyen a debilitar nuestra moneda. Me refiero, en particular, a que los inversionistas internacionales tienen ahora una percepción más realista respecto a las posibilidades de que avancemos en México en las reformas estructurales, lo que junto con el forcejo político interno antes de las elecciones, también reduce el ingreso de capital al país depreciando nuestra moneda.

Ahora bien, la evolución del peso frente al dólar en el futuro próximo estará en función de, por lo menos, dos tipos de factores: uno externo y otro interno. El primero se refiere a la respuesta de la inversión extranjera directa y los flujos de capital, una vez que se supere la guerra entre Estados...

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