VISIÓN ECONÓMICA / Decisiones negativas
| Autor | Salvador Kalifa |
La improvisación y las propuestas de políticas con base en ocurrencias, latidas o "ideas geniales", sin el respaldo de estudios profesionales previos, así como evaluaciones sobre sus repercusiones económicas, está siendo lo que caracteriza al Presidente electo Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y a los representantes de Morena en el Congreso.
La decisión de AMLO de cancelar el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco y la iniciativa de ley de Ricardo Monreal, líder de Morena en la cámara de senadores, para regular o eliminar los cobros de comisiones bancarias, tuvieron un efecto devastador sobre los mercados financieros, depreciando al peso y desplomando los precios de las acciones en la Bolsa Mexicana de Valores.
Estos eventos, que ocurren aun antes de que inicie el Gobierno de AMLO, no son un buen augurio para la economía durante su administración. Menos cuando los senadores morenistas continúan promoviendo la iniciativa de Monreal, a pesar de que el Presidente electo, al buscar tranquilizar a los mercados, declaró el viernes de la semana pasada que no habría cambio legal alguno en el sector financiero durante los primeros 3 años de su Gobierno.
Por un lado, la cancelación del aeropuerto, así como la construcción del tren Maya y dos refinerías, si bien fueron planteamientos hechos por AMLO como candidato a la presidencia, deberían una vez que ganó la contienda electoral someterse a un proceso intenso de evaluación técnica y profesional sobre su viabilidad económica. No ha sido así. El futuro presidente optó por continuar la farsa de sus consultas populares para justificar las acciones que hagan realidad sus promesas, sin detenerse a pensar que se traducirán, muy probablemente, en un gran desperdicio de recursos y mayores costos para la población.
Por otro lado, la iniciativa de Monreal, que se fundamenta en comparaciones simplistas sobre la composición de los ingresos de los bancos, pero carece de estudios serios y profesionales, es un claro indicio del sesgo populista e intervencionista que tendrá la bancada de Morena en el Congreso, que con la excusa de ayudar a la población justificará todo tipo de regulaciones y controles.
Por cierto, con base en ese criterio comparativo tan pedestre, el senador Monreal bien podría convertirse también en paladín de los consumidores de gasolina, que pagan en México un impuesto muy superior al que se paga en Estados Unidos (EU), así como de los contribuyentes, quienes...
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