Vidal Garza / El voto de Brasil
| Autor | Vidal Garza |
El concepto de desarrollo de países periféricos, acuñado por W. Arthur Lewis y empujado por la CEPAL en los años 50, suponía un crecimiento económico para América Latina dependiente de lo que hicieran las economías dominantes de América y Europa.
Era una sumisión que nos obligaba a pensar poco en nuestras fortalezas y más en las consecuencias de lo que el otro hacía. Una pésima teoría para explicar por qué la región latinoamericana no podía librarse del yugo dominante de las economías más fuertes.
Afortunadamente esto ha cambiado bastante desde entonces.
Esto se puede ver en la manera en que algunos países han llevado a cabo sus acciones para lograr un mejor desarrollo, distintas entre ellos, pero mayoritariamente respetando las leyes universales de la economía moderna; algunos abrazando las teorías económicas de libre mercado, que es realmente la única forma de expandir el crecimiento económico por encima de las capacidades de cada país o región, y otros manteniendo una posición entreabierta al comercio con una dosis de desarrollo propio, pero limitado.
Todos los países han contado con un alto ingrediente de política que, en algunos casos, se ha extremado hasta el grado de rayar en el fundamentalismo de ideas socialistas sin una plataforma sólida de resultados a no ser que tengan petróleo y gas en abundancia, como Venezuela y Bolivia por ejemplo.
A excepción de Costa Rica quizá, toda Centroamérica refleja una alta veneración política a sus líderes y autoridades; se explota ese fanatismo y se refuerzan las justificaciones para no poder desarrollarse plenamente. Una vista a lo que pasa hoy en Ecuador es un ejemplo de esto.
La democracia plena no ha sido un examen aprobado para muchos países de la región latinoamericana. Parecería que el legado de gobiernos militares y autoritarios ha hecho difícil para la ciudadanía en general aprender para ser una ciudadanía activa en democracia.
Si bien todos tienen democracias funcionales, exceptuando quizá una isla en el Mar Caribe, la verdadera tarea de sentirse dueños de las decisiones públicas, de contribuir a la generación de valor público como ciudadanos de un país, de considerar el bien de todos y no de un pequeño grupo, no es tan clara a lo largo y ancho de América Latina.
Pero algo ha estado cambiando en las últimas décadas. Las regiones de América Latina hoy crecen más que Estados Unidos y Europa. De hecho vale la pena reiterar que el liderazgo en América Latina hoy se ha movido al cono sur, y...
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