La vida de los otros
| Autor | Daniel de la Fuente |
Una sola vida llenaría el universo, afirma la psicoanalista María Eugenia Rangel Domene. De allí que esté consciente del valor de una existencia y de que sus tribulaciones no pueden ser desenredadas en una sesión de terapia.
Para ello, se requieren meses o años. Pero ¿qué hay con los niños, esos en los que esta psicóloga se especializó cuando nadie lo hacía, aunado a atender adultos? ¿Quiénes son más difíciles como pacientes?
"El niño lo es más", responde esperando la pregunta esta mujer de tez blanca, cabello corto y negro y ojos verdes. "Para aquel necesitas formas distintas de interrogar.
"Me he tenido que sentar en el suelo y jugar a lo que propongan porque ése es el tipo de comunicación que piden".
Algunos, grandes y sanados emocionalmente, vuelven a su consultorio y sobre todo a ese rincón mágico donde lloraron, aprendieron a curarse, perdonar y autocuestionarse. Donde pasaron de la niñez a la vida adulta.
Ese espacio se ubica en una habitación contigua al consultorio "para adultos" de María Eugenia, donde destacan juegos de mesa, carritos, monitos, botes de plastilina y una casa de muñecas.
Una cómoda guarda dibujos y escritos que los pequeños elaboraron y donde quedaron plasmados ángeles y demonios.
"Ésos no te los puedo enseñar, son confidenciales", sonríe.
Para brindar un buen servicio, ella debió abrir camino, ya que al graduarse de psicología de la UDEM, en 1975, no había sitios donde atender el equilibrio emocional de los pequeños.
"De esto me di cuenta cuando, al abrir mi primer consultorio, me referían niños y me sentía incompetente para atenderlos".
Esta incursión y la apertura del Instituto de Salud Mental, que en este año cumple tres décadas de servicio, son los que la han hecho pieza clave del desarrollo de la psicología y la educación especial en Monterrey.
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"¿Voy a hablar de mí?", pregunta con humor. "Estoy tan acostumbrada a ser la que escucha que no hablo de mí".
La de María Eugenia o "Maruca", como le dicen, es una de las familias importantes en la historia cultural de la ciudad. Basta citar a su tío Raúl Rangel Frías, y al hermano de ella, el poeta recientemente fallecido Ernesto Rangel Domene.
Nacida el 16 de octubre de 1939, ella misma es escritora. En 1991 publicó En el bárbaro Norte y otros relatos y los poemarios Tierra sin entonces y Lo deshojado, lo intacto.
En su consultorio, en el tercer piso de un edificio por la Loma Larga, en el que saltan a la vista cuadros de Saskia Juárez, Rodolfo Ríos, su hija...
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