Usa UDEM robots en práctica médica
| Autor | Daniel Santiago |
El ahora médico Andrés Barradas recuerda la primera vez que en su etapa de prácticas le tocó revisar a una paciente. Ella estaba embarazada. Repentinamente, el estudiante dejó de escuchar al bebé.
Nervioso, pidió ayuda, relata este joven, quien actualmente es auxiliar del Laboratorio de Simulación Clínica que la UDEM abrió para que estudiantes de las carreras de Ciencias de la Salud se entrenen con robots para atender emergencias de la manera más real posible.
Pero también para que, poco a poco, se habitúen al estrés que caracteriza a esas primeras situaciones médicas críticas a las que se enfrentarán.
En una residencia del sector Obispado adaptada como un pequeño hospital, los futuros médicos resuelven diagnósticos en los que los pacientes son maniquíes que, a través de un software, se programan para simular diferentes cuadros clínicos.
Este ejercicio representa un paso intermedio entre el aula y el momento en que tendrán que salir para realizar sus prácticas en algún hospital público o privado y comenzar a aplicar sus conocimientos de medicina.
"Con estos simuladores robóticos los estudiantes tienen la ventaja de que pueden practicar, desarrollar habilidades en un ambiente seguro", dice Barradas, graduado el año pasado, justo antes de que en noviembre abriera este laboratorio.
"Saber o tener una idea de cómo responder o mínimo qué empezar a hacer en estas situaciones de emergencia da una ventaja, no a nosotros, sino al paciente".
A PRUEBA Y ERROR
Ayer, un grupo de estudiantes tuvo que atender a un bebé robot, uno de los varios pacientes con los que se practica en el laboratorio.
Los sonidos del monitor que alertaban por los bajos niveles en la respiración, pulso y presión, junto con las instrucciones del profesor y el irregular silencio del bebé contribuían a un escenario que podría ser el de cualquier hospital.
"Es un recién nacido con una depresión neonatal y el reto de los estudiantes es recordar los pasos de reanimación neonatal y volver a los signos vitales", explicó Enrique Adrián Martínez, pediatra neonatólogo y profesor titular de simulación clínica.
Tomó varios minutos para que el equipo de alumnos de noveno semestre de médico cirujano y partero pudiera reanimar al bebé, cuyo llanto fue signo de que la situación mejoraba.
"Se trata de saber lo que se tiene que hacer en la hora de un parto cuando un bebé viene deprimido", dijo la estudiante Mónica Morales.
"Así cuando vamos al internado ya no vamos en blanco y de perdido sabemos...
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