Trasciende adversidades
| Autor | Antonio Bertrán |
La primera dinámica provoca risillas nerviosas entre los adolescentes. Para romper el hielo, ellas deben mencionar los nombres coloquiales del pene, ésos que dicen sin pudor en el patio durante el recreo, y ellos, los de la vagina.
Después de varios segundos de silencio bochornoso -"decirlo afuera es otra cosa", se defiende un muchacho ante la expectativa de empezar-, un tímido "cheto" se oye por allí y una "papaya" por allá.
En la biblioteca de la Secundaria 55 República de El Salvador, poco a poco van sonando muchos de los coloquialismos que el lector está pensando. Y otros que seguro desconoce, como "quesadilla" y "dorito", que pronto forman un torrente de tono cada vez más subido que termina por apagar las risillas de pena.
"Que de una buena vez se nos quite la pena", cierra el ejercicio la doctora María Guadalupe Fragoso Palafox, "porque tiene que ser algo normal hablar del pene y la vagina, sencillamente porque su función es natural e importante".
Es evidente que la dinámica ha relajado el ambiente entre las 13 chavas y 6 chavos en plena pubertad (13-14 años), de segundo y tercer grado, que integran este Grupo de Adolescentes Promotores de la Salud (GAPS), coordinado por María Guadalupe con la asistencia del trabajador social Mario Jiménez Claudio.
Así, en la siguiente actividad Jennifer se anima rápidamente a pasar al frente a demostrar cómo se coloca un condón con la boca.
La médica ya sostiene en la palma de la mano un falo de plástico de tamaño mediano y empieza a repasar con la estudiante de tercero la teoría de la técnica, que trataron en la sesión del martes anterior: lavarse las manos, revisar la caducidad del empaque, abrirlo por la orilla indicada sin usar los dientes, darle una vuelta a la punta de látex...
Y boca a la obra, el arte de Jennifer arranca los aplausos de sus compañeros.
Antes de iniciar esa sesión, que también incluiría un ejercicio con el condón femenino en una vulva de plástico protagonizado por Hanna y Sebastián, Mario hizo un anuncio a los alumnos: "Les informo que estamos muy contentos porque la doctora Fragoso recibió el Premio a la Médica del Año 2017", que otorga la Asociación Nacional de Mujeres Médicas Matilde Petra Montoya.
La organización decidió reconocer a María Guadalupe precisamente por ese trabajo desarrollado desde 2012 con los GAPS, que lo mismo en alumnos de primaria, secundaria y bachillerato busca "empoderar a los adolescentes para crear líderes en salud sexual y reproductiva que fomenten cambios de estilo de vida en sus pares".
Cualquier persona -digamos- de 30 años o más que hubiera presenciado las dinámicas en la Secundaria 55, habría pensado después del primer momento de sonrojo: "¡Imposible imaginar que algo así hubiera ocurrido en mis tiempos!".
Pero al final la inevitable reflexión sería: "Qué bueno que esto se dé ahora, porque en las típicas pláticas que propicia el despertar sexual estas chicas y muchachos podrán 'educar' a sus cuates de manera coloquial y casi sin darse cuenta".
Lo más importante para María Guadalupe y Mario es que los alumnos tengan los conocimientos para evitar infecciones de transmisión sexual y embarazos a edad temprana.
Estos últimos y la violencia, advierte la médica, son de las problemáticas más frecuentes entre la población joven y entre los pacientes de su consulta como coordinadora del Núcleo Amigable con el Adolescente del Centro de Salud Dr. Galo Soberón y Parra, ubicado en la misma...
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