Tragedia y creación
En tres líneas, este haiku del poeta Masuda Misako retrata el horror que se vivió el 6 y el 9 de agosto de 1945 en Japón cuando se lanzaron las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, las únicas dos armas nucleares de la historia utilizadas en guerra.
Del bombardeo atómico que acabó con decenas de miles de vidas hace siete décadas han surgido incontables manifestaciones artísticas, tanto de profesionales como de supervivientes con la necesidad de transmitir su dolor y no quedar en el olvido.
A continuación algunos de los más célebres ejemplos que retratan la muerte y la destrucción, pero también la recuperación de uno de los desastres más impactantes del siglo 20.
Artes plásticas
LOS PANELES DE HIROSHIMA · Iri y Toshi Maruki
Tres días después del bombardeo en Hiroshima, Iri Maruki, oriundo de esa ciudad, y su esposa Toshi acudieron al sitio atacado para ayudar a los familiares que habían sobrevivido, y lo que vieron los motivó a compartir el horror a través de su talento artístico.
En la serie de paneles, todos de 1.8 por 7.2 metros y hechos sobre papel de arroz (foto arriba), el matrimonio japonés combinó estilos tradicionales de dibujo de su cultura combinados con elementos como el uso prominente del color rojo para representar el fuego y la sangre.
Aunque los 15 paneles originales, realizados entre 1950 y 1982, se enfocan en escenas del bombardeo atómico, los artistas decidieron expandir su obra hacia otras víctimas de la guerra, señala Michiko Tanaka, profesora de Historia de Japón de El Colegio de México.
"Cuando las expusieron en Estados Unidos les habían reclamado que Japón también fue agresor en la guerra, en Corea, en Manchuria, en China, entonces agregaron paneles que reflejan ese aspecto de la guerra en Asia Pacífico, donde Japón fue victimario", explica.
Estas observaciones llevaron a la pareja de artistas a realizar murales sobre otras agresiones, como los actos realizados en Auschwitz, y la Masacre de Nankín, esta última perpetrada por el ejército japonés en 1937.
Música
TRENO POR LAS VÍCTIMAS DE HIROSHIMA · Krzystof Penderecki
Para recrear con música el trauma del impacto del ataque nuclear en Japón, quizá sea necesario alejarse de toda teoría tradicional y ofrecer una pieza que retrate el caos, como lo hizo Krzystof Penderecki con el "Treno por las víctimas de Hiroshima".
Aunque el compositor polaco originalmente llamó a la obra "8'37" en referencia a su duración, al escuchar el poder de su interpretación en vivo decidió...
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