Trafican con libros del Registro Público
| Autor | Melitón García y Fernando Martínez |
Seguir los conductos oficiales para obtener un documento en el Registro Público de la Propiedad puede llevarle a un ciudadano seis días hábiles o más, sin embargo, un "gestor" puede tramitarlo en cuatro horas... con el poder del soborno.
Casos de burocratismo o negligencia entre el personal de la dependencia estatal han fomentado la actividad de los "coyotes" y ganancias para quienes trafican con los libros del Registro Público.
El mecanismo oficial para consultas establece que si un libro está prestado, el solicitante deberá dejar pasar tres días hábiles y volverlo a solicitar.
Si en la siguiente vez, el libro tampoco está disponible, el interesado deberá dejar pasar hasta otros tres días, para que posteriormente, y sólo si éste insiste, le hagan una búsqueda especial y pueda tener el documento al siguiente día.
Y es que ir al Registro Público de la Propiedad, en Colón y Héroe de Nacozari, sin tener la información de los libros a consultar significa tener que hacer una fila para pagar 39 pesos por la búsqueda y otra para que en otro mostrador hagan efectiva esa busca, en lo cual el usuario puede llevarse un largo tiempo.
Además, después de que se identifica el libro que contiene el documento solicitado, el ciudadano tiene que acercarse a otro cubículo para pedir un formato de solicitud para que se lo presten, pasar a otro mostrador a entregar el formato y esperar hasta una hora más para que le digan si lo encontraron o no.
En la mayoría de los casos la respuesta es la misma: "Señor, el libro que solicitó está ocupado".
La voz se corre de inmediato entre ciudadanos, empleados y "gestores", y si el solicitante de un documento demuestra tener prisa para conseguirlo, pronto encontrará quién le proporcione lo que de manera legal no pudo conseguir.
Ante varias quejas de ciudadanos sobre el coyotaje en la dependencia, dos reporteros de EL NORTE siguieron el rastro a varios de estos "gestores" ilegales.
CASO UNO
El martes 17 de este mes, a las 13:00 horas, luego de pagar 39 pesos para una búsqueda, uno de los reporteros intenta conseguir una copia de la inscripción de un predio en San Pedro.
A las 13:55 horas, tras esperar de pie en la insuficiente sala de consulta de la dependencia, una de las empleadas frenó sus pretensiones al llamarlo a gritos por su nombre, mostrando el pequeño formato de solicitud con los datos del libro requerido.
"Está ocupado este libro", le dice al reportero al acercarse, "me lo pide por favor... ¿qué es ahora?, martes...
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