Sugerencias del gourmet / Un servicio de primera

AutorG.L. Othón

Se sabe que muchos de los grandes inventos han nacido de errores (algunos iguales de grandes) y los platillos a veces más famosos de la cocina no son la excepción.

Cuenta la leyenda que en el sur del Brasil, un mesero llevó una espada con carne a la mesa equivocada, pero el comensal, lleno de antojo y el mesero lleno de pena le dejó un pequeño corte en su plato... y así nació el rodizio.

El pasado 18 de mayo abrió sus puertas el Galpao Do Brasil en la Plaza 550 en la Av. Revolución, muy cerca de su cruce con Chapultepec, al sur de la Ciudad.

De diseño modernista y mobiliario acorde presenta todo lo que uno espera de un restaurante de este tipo, donde bien es cierto que la estrella son las espadas y el desfile de sus meseros en constante rodeo entre parrilla y plato, pero la barra de ensaladas y la de platillos calientes también deben cumplir con el decoro propio de un buen lugar.

Queremos destacar el surtido y sobre todo la presentación de sus ensaladas, y sobre todo no pases por alto la enorme cantidad de opciones para sazonarlas, el Galpao ofrece toda clase de aderezos y salsas.

Hay tres tipos de buffet y como han incluido hasta pizza en su menú, puedes elegir entre el más sencillo, que no incluye cortes de carnes (pero el precio es muy razonable), hasta el más completo, al que no le falta ningún alimento.

La carta de bebidas es muy variada y completa, aunque sus precios son hasta 20 por ciento más altos que en restaurantes similares.

A pesar de que el lugar estaba muy concurrido, la cocina se organizó brillantemente y no tardaron en llegar los cortes.

Las primeras espadas eran de pollo estilo BBQ que estaba pasado de dulzor, otras de chistorra y la de arrachera que abrió plaza, pues nos gustó su suavidad y su buen término. Por cierto, no descartes la espada de piña a la canela.

La atención se centraba en la esperada picaña, ese corte tan distintivo del Brasil, que proviene del cuadril trasero en el lomo alto de la res, y todo chef aprecia mucho su característica capa de grasa que en la espada le da distinción y sabor muy particular.

Se agradeció que lleguen repetidamente con picaña, y no dudes en pedirle al mesero tu punto de cocción preferido porque en la misma espada hay variedad. También nos agradaron mucho las espadas de filete...

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