Sergio Elías Gutiérrez / Libertad de procreación

AutorSergio Elías Gutiérrez

Empiezo con una declaración: no estoy de acuerdo con el aborto o la interrupción del embarazo. Sigo con una convicción personal: no estoy de acuerdo que se penalice a la mujer que, por cualquier circunstancia, se vea en la necesidad de abortar.

El tema del aborto, del que se ocupó la Legislatura estatal recientemente, renovó la vieja idea de que el Derecho debe seguir subordinado a fines religiosos que en ocasiones rayan en el fanatismo.

Eso no obstante que hace algunos años se reformó el Artículo 40 de la Constitución para señalar que "es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una república representativa, democrática, laica y federal".

Con la reforma emprendida en el Congreso de Nuevo León son ya más de la mitad de los Estados del País que han reformado sus Constituciones locales para señalar que la vida inicia desde la concepción.

El tema tiene ya larga historia. En 1974, después de que en el censo de 1970 arrojó que México era el país con mayor crecimiento demográfico en el mundo, se incluyó en el Artículo 4 de la Constitución que "toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y espaciamiento de sus hijos".

En el mismo artículo se señaló "la igualdad del varón y la mujer ante la ley". Además, se obligó a que se reformaran las muchas leyes discriminatorias de la igualdad de las mujeres.

Pero, hasta ahora, ninguna ley o sentencia de tribunal alguno ha establecido qué alcance debe tener el "derecho de toda persona a decidir el número (cuántos) y el espaciamiento (cuándo) de sus hijos".

Sólo en Chiapas, en 1990, el Congreso del Estado decidió despenalizar el aborto, ya fuera que lo "solicitara una pareja con fines de planificación familiar, una mujer soltera o simplemente por razones económicas cualquier mujer".

Se registraba en esa fecha un alto número de muertes de mujeres que empujadas por la pobreza o la ignorancia se practicaban los abortos sin atención médica alguna.

Ante la oposición de grupos religiosos, se congeló la reforma aprobada por el Congreso de Chiapas. Ése fue el único intento en el País para regular la libertad de procreación. Sin embargo, no se llegó a decidir judicialmente su validez constitucional.

En Estados Unidos, en 1973, se llevó a la Suprema Corte de ese país una demanda de inconstitucionalidad del Código Penal de Texas que sancionaba el aborto.

El caso conocido como Roe vs. Wade se resolvió en ese alto tribunal compuesto de nueve jueces (justices) por una...

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