Sergio Elías Gutiérrez/ Hay apoyos que matan
| Autor | Sergio Elías Gutiérrez |
A escaso mes y medio de las elecciones que se anuncian ya como las más competidas de la historia, parecería que no hay nada definido para nadie. Las encuestas son utilizadas como instrumento de campaña electoral más que como una fuente de información para quien la patrocina. Su veracidad es dudosa al diferir en los resultados que arrojan, al menos las que hacen publicas los propios partidos.
Después del debate del mese pasado, se perfilaron los finalistas para el 2 de Julio. Algunas encuestas, como la divulgada por la empresa encuestadora Pearson que trabaja para el PRI, da una ventaja del 6 por ciento a Labastida, aunque aclara que en los últimos dos meses ha perdido 17 por ciento de la intención del voto.
Desde las filas panistas responden con otra encuesta, patrocinada por Reuters, en la que aparece como favorito para las elecciones el panista Vicente Fox por la misma diferencia. Sólo falta que aparezca alguna empresa encuestadora "patito" que nos diga que después del debate del mes pasado, el favorito sentimental Rincón Gallardo es también ya el puntero en las encuestas.
Lo evidente es que en todos los frentes se alistan para la recta final, que será de pronóstico reservado. Para algunos, a Fox lo favorece que su tendencia es ascendente en tanto, como señalo la agencia Pearson, la de Labastida viene de bajada.
La amenaza de ser derrotado ha provocado que el candidato del PRI haya convocado a reforzar la etapa final de la campaña a connotados priístas de la vieja escuela. Los refuerzos seguirán sumándose en los próximos días, bajo la consigna de que si pierde Labastida se cae el sistema, y no el de cómputo. De perder el PRI no sólo pierde Labastida, parece ser la idea que provoca la unidad de los priístas.
El PRI no se repone del desconcierto de enfrentar por vez primera a una oposición estructurada y organizada para competir y para ganar. La campaña de Vicente Fox es sin duda la mejor campaña política que se haya realizado en México, incluyendo a las del partido en el poder, que realmente nunca tuvo necesidad de esforzarse mucho para ganar. Para los priístas, por supuesto, ésta es sólo la más costosa campaña, pero no la mejor.
Fox inició su carrera a la Presidencia de la República casi al mismo tiempo que tomó posesión de la gubernatura de Guanajuato, hace poco más de cinco años. Su experiencia en mercadotecnia hizo que la diseñara por etapas sucesivas que se han cumplido al pie de la letra. Primero, dar a conocer al personaje. De ahí a...
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