El sector social: todo un empleo

AutorLuis López

El trabajo social no se limita a la labor voluntaria. Es un área donde se puede realizar una verdadera carrera profesional.

La profesionalización de este sector, coinciden expertos en el área, es benéfica en todos los sentidos, pues ofrece a quienes se integran al mercado laboral una opción de empleo en un trabajo que se preocupa por el impacto social más allá del crecimiento individual.

Con remuneración y prestaciones adecuadas a sus empleados, las organizaciones de labor social pueden a su vez enfocarse en proyectos de largo plazo y con un mayor alcance.

1 TRABAJO DE IMPACTO

La generación que empieza a buscar trabajo o tiene poca experiencia laboral se identifica cada vez menos con la idea empresarial del pasado, concentrada en el ingreso para beneficio individual, indica Armando Estrada, director de la organización Vía Educación.

Los jóvenes hoy, añade, optan por entrar a una causa que les permita aportar a su comunidad o mejorar la calidad de vida de los demás.

"Escuchamos que los millennials vienen pensando muy fuerte en eso, con la distinción de no querer trabajar únicamente para que les den estatus, reconocimiento y prestaciones, sino en algo que tiene un sentido mayor.

"Por eso hay una gran oportunidad de las organizaciones de la sociedad civil de profesionalizarse para atraer a ese talento joven y fresco, si logran apelar a esos deseos", dice.

Con personal tanto capacitado como interesado en el sector social se encamina la sociedad a un mayor desarrollo, afirma Sandrine Molinard, directora de Consejo Cívico.

"No trabaja en el sector social quien no encontró trabajo en otro lado, sino gente talentosa y comprometida con esta área", indica. "El nivel de democracia y apertura de los países se correlaciona con la cantidad y presencia de organizaciones de la sociedad civil".

2 ATRAER DESDE LA UNIVERSIDAD

Si se inculca la labor social con fuerza desde la universidad, el interés hacia el trabajo en las organizaciones civiles será mucho mayor, afirma Molinard.

El sector, detalla, generalmente se nutre con personas que desde su formación académica lideran grupos estudiantiles de servicio social, es decir, que ya tienen ese "chip".

Sin embargo, ese impulso puede detenerse en quienes no hallan un espacio profesional donde continuar su labor social.

"Pasa mucho que vienen jóvenes con toda esta energía desde la universidad, con labor extraacadémica muy intensa, y luego se gradúan, los contratan en algún lugar y pierden esta liga con la sociedad...

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