San Cadilla

Estamos a tiempo

Pues qué podemos decir que no se haya advertido tanto desde la edición pasada.

Señores, aún se está a tiempo de revertir muchas de las actitudes que por años ha distinguido a la afición regiomontana, que es la agresividad de las aficiones.

Sííí, dirán que soy un purista, una niña y que esto es futbol y que nos debemos de aguantar, que así son las cosas aquí en Monterrey.

Díganme si no, señores, léanlo y díganme si tengo o no tengo razón.

Comencemos con los grupos de WhatsApp. No hay uno de ellos donde los aficionados Tigres no reten a los "Gayados" (como les dicen) y que digan que ahora sí se les apareció el chamuco, con sus memes y todo lo que los de la Pandilla tienen que soportar.

Y los de El Barrial están igual. Con agresiones verbales (igual que los felinos), con discriminación, acciones (de ambos) que van provocando roses que los días de los juegos llegan a estallar.

Se ve, se siente y se lee tanto fanatismo, tanta enfermedad que en muchos casos ha provocado pleitos, enemistades, insultos, rencor... ¡y todo por defender a tu móndrigo equipo de futbol!

Y muchas veces ni eso es: hay muchos enfermos que se la pasan más tiempo tirándole al rival, y de su equipo hablan sólo el 20 por ciento. Ahí ves el grado de enfermedad. Revisen sus TL, sus whats. Ves la calidad de "enfermedad" cuando de cada 10 mensajes, 8 son para hablar del otro.

Han de decir que todo eso es carrilla normal, pero tanta acumulación de golpeteos, de insultos y todo lo que les describí terminan por provocar un odio al rival y -todo ello- finaliza en lo que vemos en los Clásicos: violencia.

Yo soy el principal detractor de las barras en el futbol, pero hay que ser parejos: su violencia (cuando la hay) son los días del juego y no entre semana.

Tal vez no toman mucho en cuenta la violencia "internetética" (palabra que no existe; era para darle un nombre), pero ésta envenena sentimientos, provoca odio al rival y un enorme deseo de que Tigres/Rayados humille a Rayados/Tigres.

Y cuando uno de los dos lo consiga, va a comenzar a desquitarse de los insultos y humillaciones que por Whats, Twitter o Face le provocaron, y eso podría verse en las tribunas o fuera del estadio.

Tanto criticamos al Sylvester Stallone Región 4 de la barra de Tigres cuando le preguntaron que si los golpes y estar en la cárcel valía la pena, y su triste respuesta fue: "Por los Tigres, sí, sí vale la pena".

No veo que estemos muy alejados al "Rocky regio".

¿Vale la pena humillar, insultar...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR