Rogelio Ríos / Seguridad o privacidad

AutorRogelio Ríos

Tal vez sólo sea un rasgo inherente a las sociedades modernas de hoy, súper pobladas, económicamente prósperas y socialmente diversificadas que la necesidad de control de sus autoridades las lleve a atisbar la vida de sus ciudadanos.

Nombre usted a cualquier Gobierno y ninguno librará el señalamiento de que vigila o espía a sus ciudadanos o extranjeros sospechosos, se mete en sus cuentas y vías privadas, indaga sus preferencias y actividades políticas, conoce de sus virtudes y vicios privados, sus preferencias sexuales, en fin, todo lo que un ser humano bajo observación puede mostrar a sus observadores.

No sorprende que al ciudadano se le vigile, eso no es nuevo. Lo que resulta devastadoramente revelador es la escala con que hoy se hace, por lo menos y sin descartar a otros gobiernos, en Estados Unidos: mediante diversos programas, la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) desde el 2007 tiene acceso a registros de llamadas telefónicas y correos electrónicos de ciudadanos estadounidenses mediante redes telefónicas como Verizon; y entra mediante el programa PRISM a redes sociales como Skype, Facebook y Google para monitorear supuestamente sólo a ciudadanos extranjeros fuera de Estados Unidos, no a ciudadanos estadounidenses.

El Presidente Obama señaló ayer que hay un montón de "salvaguardas" en esas actividades de vigilancia gubernamental y de controles para proteger a los ciudadanos de intromisiones indebidas en sus vidas.

Y expresó lo que me parece son los términos crudos del debate que se abrió en Estados Unidos desde el 9/11 y que tiene para rato: "No se puede tener 100 por ciento de seguridad y tener también 100 por ciento de privacidad y cero inconvenientes. Vamos a tener que tomar algunas decisiones como sociedad".

Obama lo dice de buena fe, pero resulta difícil creer que si se tiene la tecnología disponible, si el uso del "big data" para recopilar información está en práctica, y si las Cortes estadounidenses permiten a la NSA vigilar "legalmente" a sus ciudadanos, se respetarán en todo nivel operativo los límites meramente formales como el de que un ciudadano se encuentre fuera o no de Estados Unidos, o sea o no oriundo del país vecino.

Alegar la razón de Estado y la búsqueda de equilibrio entre seguridad y privacidad no quita, sin embargo, ni una pizca del asombro...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR