Una revancha personal

AutorDiego Martínez

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MIAMI.- El dinero y la "amistad" no compraron el título en la NBA. Un verdadero equipo mató a una tercia.

Los Mavericks de Dallas lo lograron. Sabían que era "El Día" y salieron anoche a la duela del Heat para derrotarlos 105-95 en el Juego 6 de la Final de la NBA.

Los texanos se llevaron de visita 4-2 la serie, aunque no eran favoritos.

El trío de súper estrellas de Miami, que unió fuerzas en el verano pasado para tratar de conquistar un título, falló en su cometido.

Dwyane Wade, LeBron James y Chris Bosh sencillamente desaparecieron ayer en la duela de la American Airlines Arena.

Wade no pudo echarse el equipo al hombro y James dio pena, incluso perdiendo balones y con tiros desviados. Lo más sobresaliente de Bosh fue que salió llorando rumbo al vestidor cuando se acabó el duelo.

Los Mavs, en cambio, jugaron como un verdadero equipo.

Dirk Nowitzki, quien cobró la revancha al Heat tras caer en la Final del 2006, tuvo un partido complicado en los primeros cuartos, pero no estaba solo. Jason Terry terminó con 27 puntos. El alemán finalizó con 21 tantos y encestó 9 de 27 disparos.

"Gracias Mavs por el show que dieron...

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