El reto de Kipchoge

AutorRubén Romero

Falta menos un mes para el 12 de octubre, fecha en la que el keniano Eliud Kipchoge tratará de romper la barrera de las dos horas en la distancia del maratón por segunda vez, pero ahora bajo el auspicio de INEOS, una empresa británica de alcance mundial.

La prueba, que se he llamado INEOS 1:59, se efectuará en Viena, Austria, en el Parque Prater, en un trayecto de 4.3 kilómetros de largo, que al sumar la ida y la vuelta acumula 8.6 kilómetros, al que Kipchoge dará poco más de cuatro vueltas.

En mayo del 2017, Kipchoge trató de romper la barrera de las dos horas con el apoyo de Nike, en un proyecto que se llamó "breaking2", que se corrió en el Autódromo de Monza, en Italia, donde se quedó a 25 segundos de vencerla.

Aquí debe hacerse una observación: tanto el intento de Monza como el de Viena son "pruebas de exhibición", que no tienen valor para efecto de récords.

Las condiciones en las que se desarrollará la prueba serán al margen de las reglas de la IAAF, por lo que los resultados no serán comparables con los récords "legítimos", como con el mundial de 1h01'39" que el mismo Kipchoge registró en el Maratón de Berlín del 2018.

Los promotores de INEOS 1:59 han querido comparar el intento de Kipchoge con la hazaña de Roger Bannister, quien rompió la barrera de los cuatro minutos en la milla en 1954, al correr para 3'59.4/100 en la pista del Iffley Road, en Oxford, a pesar de que por años se había "demostrado" científicamente que eso nunca podría...

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