Rebanadas / Momentos de Eli's
| Autor | Cony DeLantal |
Momentos delis. La semana pasada no terminé de platicarte del Centrito Valle. Creo que nunca terminaré. Hay otro restaurantito que me encantó: el nuevo Eli's Café, en Río Tamazunchale, casi en la esquina con Río Mississippi, que tiene una discreta fachada blanca y todo el glamour de la Francia clásica detrás de ella.
Parte de ese encanto viene de la propia atención familiar y personalizada de Doña Ma. Del Roble y su hija Elisa (de ahí lo de Eli's), que además trae en friega a su novio Esteban atendiendo, cobrando y contestando a todas las preguntas necias de señoras chismosas como yo. Es un joven muy amable y simpático. Cochas.
Curioso su cafecito. Es un híbrido de fina apariencia afrancesada y fomento al arte y lectura, pero con una cocina regional de chilaquiles, huevos rancheros y machacados que sabe a una mañana en Villa de Santiago.
Es el mismísimo revoltijo étnico al que hace referencia la leyenda. Ya ves lo que dicen, que hace siglos se perdió en la Villa un regimiento francés... Y por eso hay tanto güero con facciones de europeo y alma ranchera.
Pues aquí en Eli's convive esa mezcolanza mítica entre el machacado y la boulangerie con una sabrosura pareja. Tanto el desayuno como el propio pan (dulce y salado), que ellos mismos elaboran, son realmente buenos.
Su panadería está sustentada en un horno de leña que mantienen a la vista. Y al ver ese horno no puedes evitar pensar en pizzas, pero aquí no las hay... aún. Y digo "aún" porque ya me dijo Esteban que sí están en planes de seguir revolviendo etnicidades culinarias en su café, pero por lo pronto nomás funciona para su panificadora gala.
La leña hace muy especial su panadería, por el rico saborcito a pan de campo que te llevas impregnado en el paladar. Aunque desafortunadamente también en la ropa, porque nomás la prenden y adieu al aroma y el glamour de Francia. Sales de ahí oliendo a rancho. Alguna solución se les ocurrirá. Tarde o temprano todos los regiomontanos debemos aprender a lidiar con leña y humo.
Por lo pronto están concentrados básicamente en el desayuno y el brunch a base de huevos, omelettes y chilaquiles, o la comida y meriendita con ensaladas, paninis y un café de métodos alternativos que les queda reterico.
Yo empecé con el de prensa francesa, de lo poco francés que le encontré a su menú, y me encantó. El Chemex por goteo es otra opción que ahí te recomiendan. Tardadita, pero vale la pena. Con ese goteo le sacan mucho más tonos al café.
Tanto el machacado (100...
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