Rebanadas / La Gran Barra

AutorCony DeLantal

Así le han llamado al nuevo restaurante que abrieron los de La Buena Barra en Arboleda y así le llamaré yo también a la explicación que voy a tener que darle a mi marido cuando le llegue el cuentón que firmé ahí en mi martesitos de comadres.

Tiene gran lujo La Gran Barra y obvio que también vas a pagar la gran cuenta. Lo dejaron conectado y compartiendo cocina con el otro que acababan de abrir, su elegante bar Doble B, como para que empieces tu gran noche cenando en La Gran Barra y termines con unos drinks en el Doble B. O al revés. Acabes donde acabes, con lo que sí acabas es con tus ahorros.

No sé si es fake ese ticket del Doble B que andan circulando, donde alguien pagó una cuenta de más de 300 mil pesos por una botana y un par de botellas de whisky Glenfiddich 40, pero la realidad es que sí tienen ese whisky enlistado en su menú y lo tienen en 130 mil pesos. Y te juro que aquí nos sobran personajes que lo vayan a pagar o ya lo pagaron.

Por lo pronto a mis comadres y a mí nos tocó de a mil 500 pesos por piocha en La Gran Barra y sin agarrar la jarra. Fue por culpa de ese carrito que andan paseando por todo el restaurante con un trozo de prime rib al que llaman "el bebé".

Te lo acercan tapadito en su carriola y entonces te empiezan a hablar de lo lindo que es, de su suavidad y su tersura, de las ocho horas que pasa chuleándose en el horno con infusiones de romero... Para cuando lo destapan tú ya estás loca por él.

Méndigo capitán seductor -se llama Alan, para que te cuides- nos susurró antojos al oído con un lenguaje tan gastrosexual que todas caímos rendidas ante la tentación de la carne.

Él mismo se encarga de preparar al bebé frente a tus ojos y lo deja encantador, bien bañadito en jugo de carne y talqueadito con chile comapeño.

No hay duda de su calidad. Una verdadera delicia. Pero cada corte (de 16 onzas) nos costó más de mil pesos, y con la emoción (por no decir con la astucia del capitán) terminamos pidiendo de más. Obvio que aceptamos que nos lo pusieran para llevar. Yo hasta esperaba que la doggy bag fuera marca Vuitton.

Si traes presupuesto para las entradas te puedo recomendar de inicio la flor de calabaza rellena de pasta de champiñón con quesillo, capeada en maíz y salseada con tomatillo y jalapeño (272 pesos). O los ostiones al horno rellenos de huitlacoche con un toque de chipotle estofado al vino blanco (397 pesos).

Son nomás 4 ostiones, toma en cuenta que estás pagando 99 pesos por cada uno. Tienes que concentrarte en...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR