'Quiero verlos tras las rejas'

AutorJosé María Alonso

CIUDAD DE MEXICO.- Rigoberta Menchú aparece vestida como siempre, con su traje ixil, que en Guatemala lucen las empleadas domésticas de las casas finas. Su presencia provoca un discreto revuelo. Algunos piden fotografiarse con ella y otros se conforman con un autógrafo, pero el resto, la mayoría, no le dedica más que una mirada rápida e indiscreta. Muy distinto a lo que ocurre en Europa, donde Rigoberta es como Nelson Mandela o el Dalai Lama, es decir, la encarnación de la lucha por los derechos humanos, lo que se considera la más alta causa a la que se puede dedicar una vida.

Pero en el ideal colectivo de Guatemala y de México, Menchú no es como, por ejemplo, el Dalai Lama. "¿A quién le importa Rigoberta Menchú?", clama en una reunión un periodista mexicano, quien segundos después expresa su deseo de entrevistar a Yasser Arafat, también Premio Nóbel de la Paz.

El lunes pasado Menchú participó en un chat de Reforma.com. La 'multiconversación' tocó muchos e interesantes temas: derechos humanos, racismo, democracia, Guatemala, México, Chiapas... Pero en la red los contertulios son anónimos y hay quien no desperdicia la oportunidad de hacerle llegar su mensaje a la guatemalteca: 'India, puta, te vamos a matar...". Alfonso Alem, el director de la Fundación Rigoberta Menchú en la Ciudad de México, quien acompaña a la Premio Nóbel, lee el mensaje y su gesto ni se inmuta: "Esto no es nada. A la sede de la Fundación llegan cartas bien largas en las que el autor se recrea insultando a Rigoberta y expresando alegatos racistas contra los indígenas".

Menchú es una mujer con una vitalidad impresionante. Ya perdió la cuenta de las veces que ha cruzado el Atlántico en los tres últimos meses. En marzo pasado dio el gran paso: presentó en la Audiencia Nacional de la capital española una querella criminal contra ocho ex militares y ex altos funcionarios guatemaltecos, a los que acusa de genocidio y de ser los responsables de los asesinatos de su padre, su madre y dos de sus hermanos.

A la cabeza de los acusados el General Efraín Ríos Montt, Presidente golpista en 1982-83, actual hombre fuerte de Guatemala, jefe del Congreso y presidente del Frente Revolucionario de Guatemala (FRG), el partido del Presidente Alfonso Portillo.

El proceso de Madrid es la prioridad de Rigoberta y de su organización. Se le nota esperanzada: "Mi padre, mi madre, mi hermano Patrocinio, mi hermano Víctor, son cuatro de mis seres que me hacen querellante ante la Audiencia Nacional de...

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