Fricasé/ Queja constante
| Autor | El Abogado del Pueblo |
Les confesamos, amigos lectores, que nos fascina y encanta leer las Cartas a El Norte que los lectores le mandan a este medio y que éste publica en el espacio a ello dedicado.
Es una forma inmejorable de saber y constatar qué cosas le preocupan y le interesan a la ciudadanía en esta comunidad.
Si ustedes ponen atención al espacio, se percatarán que últimamente varios ciudadanos han escrito para quejarse de los dispositivos montados en fin de semana por el Municipio de Monterrey, quesque con el propósito de "combatir" al conductor ebrio.
Nada menos ayer lunes se publicó una carta típica que dice lo siguiente: "Lo único que quiero comentar es lo de las antialcohólicas. Ya se están pasando, de veras, están abusando de la CORRUPCION (énfasis nuestro). Para mí no es justo que se pongan entre calles con tal de sacar dinero y te asusten: que si te tomaste una copa te recogen el carro. Eso no puede ser".
Esto lo dice el ciudadano Ricardo Silva.
Como esta carta, amigos, se han publicado ya muchas otras: todas más o menos en el mismo sentido.
Además, por otros lados hemos recogido esta misma queja que no hemos podido constatar personalmente debido a dos problemas fundamentales:
-
- Que para las nueve de la noche ya estamos como oso en invernadero y...
-
- Que no tomamos.
O sea que "no se han dado" las condiciones propicias para que pudiera éste su abogadete "participar" en estas campañas y poder reportarles una vivencia personal.
Como quiera, nos parece muy bueno que exista gente más lozana y fuerte que sí pueda desvelarse y alegrarse -moderadamente- con una que otra copa.
Nada tenemos contra este esparcimiento adulto, y se antoja que no es algo que amerite legislación o actuación "de poder", sino que más bien pertenece al terreno de la educación.
Es decir, la gente -si es adulta y pensante- debe poder saber moderarse en la ingestión de brebajes alegrantes, o cuando menos -mediante la designación de un conductor sobrio- prever la posibilidad de que entrada la madrugada retornar al hogar será un acto en el que podrá participar sólo como pasajero.
De manera que queda claro, no implicamos condena alguna a los trasnochados al abordar el tema, por el contrario, envidiamos su condición física y disposición a la alegría.
Dicho lo anterior, queda claro que "algo" está pasando con los mencionados "operativos", ya que la ciudadanía se queja de que amparados bajo un pretexto que suena "noble" los representantes de la autoridad se están escudando para...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba