Prematuro en casa

AutorNatalia Vitela

La llegada del bebé al hogar siempre implica retos, especialmente para los papás primerizos, pero éstos son aún mayores cuando se trata de un prematuro.

Por eso es muy importante que durante la estancia del niño en el hospital, los papás observen cómo las enfermeras lo atienden en su rutina diaria, y que pongan especial atención en los cuidados que más temor les causan.

De acuerdo con la Guía para Padres de Niños Prematuros, elaborada por especialistas del Instituto Nacional de Pediatría y la Universidad Autónoma Metropolitana, los padres deben informarse acerca de los problemas que su hijo presentó en el hospital y solicitar información sobre los cuidados en casa.

Por ejemplo, deben pedir al médico que les explique qué fármacos seguirá requiriendo y cómo aplicarlos.

Según Carmen Sánchez, especialista del Laboratorio de Seguimiento del Neurodesarrollo del Instituto Nacional de Pediatría, quien participó en la realización de la guía, las principales preocupaciones paternas son cómo deben alimentarlo, cargarlo y bañarlo.

"Salen en condiciones que requieren alimentación especial con gotero, con alimentador o sonda. Cargar a un pequeño tan pequeño les da miedo. No es lo mismo bañar a un niño de tamaño regular", comenta Sánchez.

Eso motivó la creación de esta guía, según la cual, es esencial que los papás tengan claras las condiciones que presentan estos bebés a diferencia de los recién nacidos a término.

Es decir, su piel es delicada y seca, tienen dificultad para mantener la temperatura del cuerpo y se enfrían con rapidez, y permanecen dormidos la mayor parte del día, además de que se mueven poco.

En tanto que mientras duermen pueden presentar sacudidas o temblores de sus ojos, brazos o piernas. Además, tardan en abrir la boca cuando se les ofrece el pezón, maman con lentitud y se cansan al hacerlo.

Estos bebés chupan sus dedos sólo cuando están cerca de su boca y la luz llama su atención, pero no ven a los ojos.

"No debes preocuparte.. Si no logra mirar tu cara, si duerme la mayor parte del tiempo, si no despierta para que lo alimentes, si se mueve poco, si come despacio, si no intenta chupar su mano, si sientes su cuerpo con poca fuerza, si aún no sostiene su...

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