Proyecto Familia / Lo positivo y lo negativo de las familias muégano
| Autor | Fernando Pascual |
''Todos unidos en todo y para todo", así podemos definir, con una pizca de exageración, a la "familia muégano".
Porque esa familia vive en unidad muy estrecha. No sólo entre padres e hijos, sino también entre hermanos, abuelos, tíos, primos, sobrinos...
En nuestra sociedad, las familias muégano están en retirada, lo que hoy domina es la familia cada vez más reducida y aislada. Este segundo tipo de familia tiene sus peligros y su propia problemática, que conviene no perder nunca de vista. Pero ahora queremos fijarnos en ese otro estilo de familia, que se caracteriza por una fuerte cohesión interna.
Amores que matan
A primera vista, resulta hermoso ver a familias unidas, más en el mundo actual, donde domina un panorama de individualismo y de soledad en miles de hogares. Un mundo en el que incluso personas que viven "en familia", bajo el mismo techo, se sienten aisladas, encerradas en sus hobbies (lecturas, televisión, internet, videojuegos), sin ser capaces de establecer relaciones profundas con los demás familiares.
La unidad, normalmente, es fruto del amor, de la armonía, de la convivencia. Pero intuimos que todo exceso, también en la cohesión familiar, tiene sus inconvenientes.
La familia no puede ser vista como una comunidad que mira solamente hacia adentro, ni como una aglutinación íntima entre las distintas vidas personales que no deje casi espacio para esa privacidad básica que todos, en algunos momentos del día y de la semana, deseamos tener para realizar proyectos y planes personales.
Un exceso de cohesión es el que se da, precisamente, en las "familias muégano", donde los esposos están siempre juntos, con actitudes de recelo o de miedo ante la posibilidad de que él o ella salga del ámbito en el que todo estaría bajo control.
Los hijos viven bajo la atenta mirada de los padres, o en lugares donde se busca la máxima seguridad, y siempre con la obligación de informar a los padres (con la ayuda del teléfono celular) sobre la mínima novedad que pueda producirse.
Los hermanos están continuamente los unos sobre los otros, especialmente los mayores sobre los menores. Los abuelos intervienen una y otra vez en todas las decisiones: desde las más importantes (los estudios de los nietos, los arreglos de la casa, de los hijos o de los yernos) hasta las más triviales (la ropa de la niña, los juguetes del niño, el color de las sábanas, la marca de los zapatos).
Los tíos, primos y sobrinos tienen que estar informados sobre todo, y sobre todo dan su...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba