DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Plaza de almas

AutorCatón

Vieja calle de General Cepeda, en el antiguo barrio de Santiago. Niña del Ojo de Agua de Saltillo, la calle baja serpenteando, traviesa, desde lo alto del cerro donde la gente pobre vive. Aún recuerda el curso que le trazó el arroyo que luego se hizo acequia y después se hizo nada. Vieja calle de General Cepeda. Mi mundo es una hilera de casas, todas mías por el derecho de propiedad que da el recuerdo. Aquí, en ésta cuya ornada puerta conserva sus vidrios de colores, vivió Felipe Sánchez de la Fuente cuando aún no era don Felipe. ¿O lo era ya? Joven -porque también fue joven-; estudiante de primer año de Leyes, hacía reír a las lindas muchachas de su edad porque les hablaba de usted, ceremoniosamente: "¿Se encuentra usted bien, amable señorita?". Y ellas, dándole una familiar palmada en el pecho: "¡Ay, Felipe! ¡Tú siempre con tus cosas!". Paso por esa esquina en las mañanas, muy temprano. Amanece, y el Sol asoma por el picacho de la sierra de Zapalinamé. Alambica su luz en los coloridos cristales de la casa y pinta con un mágico iris la pared de enfrente. Yo vi eso hace una eternidad, cuando iba a la misa de escolares en el templo de San Juan Nepomuceno, y lo vuelvo a ver ahora. Es el mismo Sol y son los mismos vidrios. Aquí lo efímero y lo eterno tienen la misma duración. En esa otra casa, que casi no se atreve a ser casa, vivió aquella señora pequeñita, feúcha. Tiene dos cuartos amoblados con pobreza vergonzante. ¿Es pobre esa señora? No. Es rica, riquísima, porque tiene un hijo. El hijo no es fruto matrimonio. Es fruto vida, y eso cuenta más. Ella conoció a un hombre -un solo hombre, un solo día- y la vida dio testimonio de ese encuentro con un hijo que es ahora toda la vida de su madre, y es su gloria. Pequeñita y feúcha, esa mujer es grande y es hermosa por su hijo. Cuando va calle abajo con él -lo lleva de la mano- es la dueña del mundo, y no baja la vista por no tener marido, en ese tiempo en que ser madre sin esposo es baldón que convoca todas las...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR