Les pesa regulación ambiental

AutorAlfredo González

Como uno de los mayores consumidores de energía, la industria siderúrgica mexicana está en desventaja frente a sus competidores, pues sobre esta industria pesa una sobrerregulación ambientalista muy superior a los estándares del resto del mundo, coinciden líderes del sector.

"Aun cuando México sólo aporta el 1 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo, nuestras autoridades son más papistas que el papa en materia de regulación ambiental", considera Juan Antonio Reboulen Bernal, director de comercio internacional de Deacero.

"El mayor reto que tiene la industria siderúrgica en materia de sustentabilidad ambiental es que nuestras políticas regulatorias sean acordes a nuestra huella de carbono".

El primer golpe fue la aprobación de un "Impuesto al Carbono" dentro de la reforma fiscal presentada por la Administración del Presidente Enrique Peña Nieto en el 2013.

Dicho impuesto empezó a aplicarse desde enero del 2014, como parte de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), en la que también el Gobierno gravó a otros productos, como los llamados alimentos chatarra, lo que compensó, en parte, la caída de los ingresos petroleros.

"Creo que en el País las industrias hemos pagado muy cara la alianza del Partido Revolucionario Institucional (PRI) con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM)", añade Reboulen.

"Sentimos que se han aprobado con la mayoría parlamentaria del PRI, del Partido Verde y de sus aliados una serie de regulaciones que atienden más a razones políticas que a realidades sustentables".

El segundo golpe vino con un "madruguete" en pleno 24 de diciembre del 2015, en las fiestas navideñas.

El Ejecutivo federal promulgó la Ley de Transición Energética (LTE), también conocida como la "Ley Verde" que introdujo la obligación de migrar al uso de generación eléctrica con tecnologías limpias hasta un 35 por ciento en el 2024.

En caso de incumplir con el requisito, las empresas deberán adquirir Certificados de Energía Limpia (CEL's).

Luis Zamudio Miechielsen, director de Altos Hornos de México (AHMSA), destaca que las empresas siderúrgicas enfrentan costos importantes para cumplir con regulaciones ambientales más estrictas que sus competidores.

"Dado que esas normas tienen un costo importante para las empresas, hemos planteado a las autoridades, como una acción básica de reciprocidad, la necesidad de que en términos de competencia justa se exija a los competidores externos aplicar la misma...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR