Pásale a mi Cocina / ¡Qué rica época!

AutorPaty Bichara

¡Hola! Me da mucho gusto saludarlos en este viernes de otoño, y aunque en Monterrey no son tan marcados los cambios de estación, el hecho es que ya gozamos de noches frescas o templadas.

Otoño e invierno son estaciones que me encantan porque marcan un nuevo gusto en el arte de comer: llegan las sopas, los caldos, los guisos y los postres más densos y concentrados.

Todo es rico y muy nutritivo, y con amplias posibilidades de incorporar en nuestros platillos favoritos la magia del sabor que las hierbas y las especias aportan a la cocina.

En general, las hojas de las plantas que usamos para cocinar las llamamos hierbas, mientras que a cualquier otra parte de la planta, generalmente ya seca, la conocemos como especia.

Las especias pueden ser brotes como el clavo, cortezas como la de la canela, raíces como el jengibre, las bayas, los granos como la pimienta, las semillas aromáticas como el comino y hasta el estigma de una flor como el azafrán.

A algunas de estas hierbas y especias que enriquecen nuestros platillos se les atribuyen propiedades curativas, como en el caso del ajo, que previene enfermedades cardiovasculares y es un magnífico antioxidante.

La ventaja más grande que encuentro en el uso de estos condimentos es que podemos cocinar con menor cantidad de sal, azúcar y grasas saturadas.

Por ejemplo, con ellos podemos marinar los alimentos, y así a la hora de cocinarlos el sabor se realza sin utilizar tanta sal, igual que con los aderezos, pues las hierbas infusionan de manera natural cualquier vinagreta o aderezo de crema o mayonesa.

Se usan muchas especias en la preparación de sopas, de varios tipos de curries y, en general, de la comida que se conoce como "mediterránea", favorita de muchísima gente por ser fácil de preparar, pero muy sana y sabrosa.

Los invito a perder el miedo de utilizar condimentos naturales al cocinar; se van a sorprender de lo que un puñito de hierbitas o especias puede acentuar el sabor de sus platillos y halagar al paladar mas exigente, y de pasada contribuir a cuidar la buena salud de sus comensales.

Hoy en día podemos conseguir gran variedad de hierbas frescas en cualquier supermercado, así que no te dejes intimidar por la cantidad pensando que sólo vas a utilizar la mitad de lo que te venden, pues lo que te sobre lo podrás deshidratar poniéndolo sobre una charolita cubierta con papel absorbente y dejándolo secar de manera natural.

Cuando se hayan secado las hojitas, puedes desmoronarlas con los dedos para...

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