Opinión Invitada / Y Sócrates habló...

AutorOpinión Invitada

José González Macín

Singular forma de despertar la del jueves, cuando por la mañana muchos nos enteramos de la sorpresiva declaración de Sócrates Rizzo.

Nuestro ex Gobernador nos dio la noticia de que en los PRI-gobiernos, el Presidente de la República controlaba la distribución y el tránsito de droga en México.

Ahora pareciera que Rizzo está pensándolo de nuevo y que no dijo lo que dijo, o que no quiso decir lo que dijo. Sin embargo, la realidad ha superado de nuevo a la fantasía en cualquier forma de verlo. Las declaraciones de Sócrates son tan inesperadas como sin duda nunca hubiéramos pensado.

El PRI que gobierna Nuevo León desde hace casi ocho años no cabía en su sorpresa, no sé si por la franqueza o sinceridad de Rizzo o si por su protagonismo fuera de lo normal.

No hay PRI moderno. Eso lo sabemos hace muchos años. Son los mismos de la misma forma; es la misma cara desde hace tantos decenios, que ya ni nos acordamos quién es nuevo y quién es viejo.

Sin embargo, lo que sí es novedad y noticia es que uno de los que dirigieron al Revolucionario Institucional en los años de hegemonía se levante y nos hable de algo tan prohibido como los pecados priistas más deleznables.

Éste es un ex Gobernador que está sano, en sus cabales, que no habla por hablar y que sabía perfectamente lo que estaba diciendo y cómo lo estaba diciendo y por qué lo estaba diciendo; y, aun sabiéndolo, tomó la decisión de lanzarse al ruedo y contar esa durísima verdad de que el PRI dominaba y controlaba las rutas de los cárteles que transitaban droga.

El PRI se espanta, se desmarca y ataca a su ex Gobernador que fue la cabeza de aquel partido de los años 90. Recordemos que, además, el Presidente de la República al que Sócrates se refiere es nada menos y nada más que Carlos Salinas de Gortari. Ese político que para muchos ha sido y es el mejor y para otros el peor. Salinas siempre en polémica y siempre en la política.

Independientemente de la gravedad de las declaraciones desde casi cualquier punto de vista: legal, moral, penal, internacional, etc., lo relevante es que el PRI hacia adentro parece resquebrajarse. Atacan a Sócrates como al más traicionero de los mafiosos; y lo atacan más que nada por su sorpresivo y novedoso deseo de protagonismo. En este caso, la verdad no sólo duele; también incomoda.

La secrecía en la que vive el PRI pareciera cada día ser más similar a la de la mafia, en donde las verdades son hacia adentro y las mentiras son hacia afuera.

Aun hoy nos...

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