Opinión Invitada / Megumi Terui: En la ruta de la seda

AutorOpinión Invitada

Ya lo advertía Napoleón Bonaparte: "China es un león dormido... déjenle dormir, porque cuando despierte, sacudirá al mundo". Y desde que se convirtió en la segunda economía a nivel global, el Gobierno de este país asiático se ha asegurado de que los ojos del mundo volteen a ver a China.

Su cada vez más asertiva participación en el escenario internacional deja poco lugar a duda de que ha llegado a recobrar su papel como uno de los polos de poder del mundo.

Una de las tantas pruebas de ello es el Segundo Foro de la Iniciativa de Franja y Ruta que iniciará el 25 de abril, uno de los eventos más importantes para el ejercicio de la política exterior china.

La Iniciativa de Franja y Ruta (IFR) es un proyecto de dimensiones titánicas que busca lograr la coordinación de políticas a nivel internacional para el crecimiento y desarrollo, bajo tutelaje de la República Popular China. Se estima que la inversión total del proyecto alcanzará los 5 billones de dólares, entre inversión y préstamos para infraestructura, mejoras en la logística para el comercio y el intercambio académico y cultural.

Desde la entrada de Donald Trump a la Presidencia, Estados Unidos ha mostrado creciente unilateralismo y proteccionismo, al mismo tiempo que China pretende mostrarse como un bastión de la cooperación internacional y la globalización.

Esta paradoja de nuestros tiempos ha logrado que 124 países y 29 organizaciones hayan firmado acuerdos para participar en la IFR. Hace tan sólo unas semanas, Italia firmó un memorando de entendimiento con China para formar parte de la IFR, convirtiéndose en el primer país del G7 en hacerlo.

Desde luego que la Nueva Ruta de la Seda no está exenta de detractores, y sus críticas deben ser motivo de cautela: algunos de los países receptores, entre ellos Sri Lanka y Pakistán, han adquirido préstamos para la financiación de proyectos de la IFR que parecen impagables.

Para algunos de estos países, los préstamos con altos intereses por parte de China se convierten en su única opción, pues sus condiciones políticas y económicas no les permitían acceder a fondos por parte de otros organismos internacionales, como el FMI.

¿Qué beneficio puede tener la IFR para México? En el 2018, durante la Segunda Cumbre Ministerial CELAC-China, se hace una invitación formal a América Latina a formar parte de IFR. Para México, puede...

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