Opinión Invitada / Democratización de la corrupción

AutorOpinión Invitada

Andrés Clariond Rangel

Con tristeza, el ciudadano común se da cuenta de los pocos beneficios que le ha traído la democracia en México. Los males que se pensaba iban a ser erradicados con el respeto al voto siguen tan presentes como nunca y los únicos beneficiados con la llegada de la democracia son los políticos.

Una de aquellas calamidades por eliminar era la corrupción, la cual se veía como una característica intrínseca sólo de los priistas y cuyo antídoto parecía encontrarse en la alternancia. Pronto, los hijastros de Fox por el lado del PAN, los Bejarano-Padierna por el lado del PRD y tantos otros casos formaron pruebas fehacientes de que la corrupción iba a dar su pelea y que lejos estaba su cura.

Al arribar la democracia y terminar con el poder excesivo del Presidente, hizo suponer a muchos que generaría como consecuencia un decremento en los índices de corrupción. Pero lo que sucedió fue que la corrupción también se democratizó y se puso al alcance de cualquiera.

Hoy en día no se necesita llegar a lo más alto del organigrama de gobierno para volverse millonario con el dinero público. Casos como el del funcionario Chaires, de Coahuila, o las mafias dentro de la UANL, demuestran que la estela pestilente de la corrupción viaja sin dificultad de las oficinas del Palacio de Gobierno al más sencillo cubículo de burócrata.

El resultado de esta democratización de la corrupción es un descontrol total y un costo económico muy alto para el Estado. Porque no quiere decir que los de arriba roben menos y se haya prorrateado el hurto. Al contrario, las ambiciones de cada uno son mayores y todos buscan su tajada.

La corrupción ha aumentado en la cantidad de "beneficiados" y en lo que cada uno se lleva para su casa. Hace unos años terminaba su mandato un Gobernador y milagrosamente se convertía en exitoso terrateniente. En estos días salen transformados en grandes magnates con cuentas de bancos calculadas en millones de dólares.

¿Tiene algún costo para el político corrupto su proceder? Ninguno. Por el lado judicial no se les hace nada, sea esto porque sus sucesores se identifican con su conducta y les resulta familiar, o por el deficiente sistema judicial, que no sería capaz de enjuiciar ni al mismísimo Charles Manson. Por el lado social mucho menos. Al tener dinero se les abren las puertas a los mejores eventos y a las revistas de sociales más cotizadas. En sus páginas salen rodeados de quienes en privado los critican, pero en público se desviven...

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