Opinión Invitada / Consuelo Morales: Desaparecidos: reto compartido
| Autor | Opinión Invitada |
La desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ocurrida hace casi cuatro meses en Guerrero, no es más que la punta del iceberg de la crisis tan profunda en la que México se encuentra hoy. Esto ha sido señalado también por diferentes instancias internacionales como Human Rights Watch y Naciones Unidas.
Si bien la terrible tragedia ocurrida en Iguala ha cimbrado cada rincón de nuestro País, sabemos que como esos padres y madres hay miles en todo México, quienes, guiados por el amor a sus hijos, han alzado la voz a pesar del dolor y el miedo, han salido a la calle para exigir justicia y hasta han irrumpido en cuarteles militares para buscar a sus hijos e hijas.
En Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos, A.C. (Cadhac) recibimos en 2009 los primeros casos de desapariciones en Nuevo León y, desde entonces hasta hoy, estoy convencida de una cosa: no hay dolor más grande que el de una persona que es separada de su ser amado y desconoce qué le pasó, por qué no volvió a casa.
En 2011, la Procuraduría General de Justicia de Nuevo León (PGJNL) abrió por primera vez la puerta para atender a familiares de personas desaparecidas en el Estado.
Desde entonces son ya 20 reuniones generales en las que la Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de Nuevo León (Amores), Cadhac y la PGJNL analizamos conjuntamente los casos: 203 personas desaparecidas en 119 expedientes a lo largo de este tiempo.
Resultado de este caminar, este 15 de enero presentamos ante el Representante de la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos el documento "Desaparición de personas en Nuevo León. Sistematización de experiencias en búsqueda de la justicia y la verdad".
El documento es un esfuerzo por identificar nuestros aprendizajes en estos años, ubicando las mejores prácticas para que sirvan a otras personas con la misma problemática y coadyuven a la disminución de las desapariciones en el País.
Sintetizamos lo que desde nuestra experiencia es fundamental en estos casos: no estigmatizar a la víctima, empezar la búsqueda de inmediato, tratar con dignidad a las personas denunciantes, cuidar la evidencia forense, usar todos los medios para la búsqueda.
Estos procesos no se realizaban antes de que iniciara la lucha del grupo Amores y continúan sin hacerse en muchos Estados de la República.
Del 2009 al 2015 Cadhac tiene registradas a 939 personas desaparecidas de Nuevo León y 336 de otros Estados...
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