Opinión Invitada / Armando Estrada Zubía: ¡OSC, S.O.S.!

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En días recientes se dio a conocer la propuesta de miscelánea fiscal que afecta a las organizaciones de la sociedad civil (OSC).

Básicamente, con los cambios a la Ley, el Gobierno federal buscará obtener el 30 por ciento de los recursos que las fundaciones de asistencia social destinan para apoyar a poblaciones vulnerables. Éste sería un nuevo signo del extrañamiento que se ha dejado sentir por la autoridad federal hacia instituciones de este tipo.

Conviene por ello que todo ciudadano sepa con claridad qué son las OSC, qué rol juegan y por qué es importante su funcionamiento en una sociedad democrática.

Hay personas que dicen que las OSC hacen lo que el Gobierno no hace. Personalmente creo que esa aseveración es limitada y puede ser confusa.

Las OSC hacen lo que está en su objeto social, se constituyen legalmente para velar por propósitos que promuevan el bienestar de la sociedad y su entorno sin perseguir lucro por ello. Estos objetos sociales son cuidadosamente definidos porque a partir de ellos una organización puede convertirse en donataria autorizada para emitir recibos deducibles de impuestos.

No cualquier objeto social es aceptado. De 44 mil 161 OSC que hay en el País, sólo 8 mil 618 pueden expedir un comprobante de deducibilidad (DOF, 2018) aunque también existen organizaciones que por sus fines o modelos de operación no requieren donaciones y, por tanto, no necesitan este beneficio fiscal.

Las OSC trascienden a las administraciones públicas, identifican huecos y lagunas no atendidas para solucionarlas en favor de la población. Por su carácter no lucrativo, apartidista y aconfesional no responden a intereses particulares. Dado que no todas las leyes están escritas o no todas son suficientemente justas, las OSC protegen a individuos, comunidades y ecosistemas de la vulneración de sus derechos y ejercen defensoría de quienes están en posición de desventaja.

Además hacen investigación científica, protegen especies, promocionan la cultura, abogan por quienes enfrentan injusticias e inciden en la formulación de políticas públicas, entre otras acciones. Las OSC son la manera en que los ciudadanos nos organizamos para atender a las causas que nos preocupan o afectan.

En México son la ocupación de más de 2.6 millones de personas entre voluntarios y colaboradores (Inegi, 2017). En buena medida, son las que consiguen que cada mexicano y mexicana en promedio dedique 323 horas anualmente a acciones voluntarias (Encuesta Nacional de Solidaridad...

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