Opinión Invitada / Andrea Rodríguez Zavala: Puras excusas

AutorOpinión Invitada

Como siempre, como buenos mexicanos, dejamos todo para el último.

Después de una justa que creíamos decepcionante, ayer en un solo día cayeron tres medallas olímpicas, que se suman a las dos conseguidas en días anteriores, ninguna de ellas de oro.

Sin embargo, el resultado en Río 216 se queda corto contra las siete medallas que México consiguió en la Olimpiada anterior de Londres 2012.

Sin quitarle mérito a las preseas, esto se siente como cuando en alguna clase complicada de la Universidad el maestro hace la famosa "curva" y pasas la materia en último momento.

Hasta ayer sábado, México estaba situado en el lugar 61 de la justa, un sitio nada honroso que no habla bien del deporte nacional.

Los motivos y excusas sobran, y Alfredo Castillo, director de la Conade y máximo responsable del deporte en el País, las domina a la perfección.

¿Cómo está eso de que la Conade es solamente una "agencia de viajes", y que no es responsable del rendimiento de los deportistas?

Afirmar que no todo son las medallas, sino sólo vivir la experiencia de ir a los Juegos Olímpicos o que su meta era colocar a "15 atletas entre los mejores 10 del mundo" suena al típico pensamiento conformista del que acusan a los mexicanos.

Pero ¿qué pasa cuando ese conformismo lo detonan funcionarios de cuello blanco? Los que simple y sencillamente se dedicaron a quitarles su financiamiento a todos y cada uno de los atletas, al punto de que incluso tuvieron que "botear", como el boxeador Misael Rodríguez, para poder ir a la Olimpiada.

Lejos de prepararse como debería ser para enfrentar a potencias como Estados Unidos, China, Reino Unido y Rusia, países que hasta anoche habían obtenido 116, 70, 66 y 53 medallas, respectivamente, tuvieron que concentrarse en recaudar fondos para financiar sus gastos.

El presupuesto de Conade para Río 2016 fue de 17 millones de pesos, la mitad de lo que se esperaba, y de éstos, 3.9 millones se gastaron en uniformes y el resto en acompañantes de los atletas: entrenadores, fisioterapeutas y metodólogos.

Para poder completar el financiamiento, según reporta Forbes, el Comité Olímpico Mexicano tuvo que acudir a patrocinadores y hasta al mismo pueblo, con una campaña de redondeo.

Esto cuando nuestros atletas deberían de estar concentrados en una sola cosa: prepararse para las competencias deportivas sin preocupaciones de dinero.

¿Y qué hacen las autoridades deportivas con el dinero, además de pasearse en Río con la novia, mientras que algunos atletas...

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