Ya no son 'todo oídos'
| Autor | Juan Carlos García |
MÉXICO.- Entre más fuerte es el sonido en un concierto, en un antro, en una obra de teatro o hasta en una boda, el público se prende más, pero tanto artistas como espectadores, si no cuidan su oído, pueden afectar su capacidad auditiva.
Alaska, la intérprete de "A Quién le Importa", afirma que sí ha disminuido su audición, pues nunca cuidó sus oídos en su juventud.
"No sé cuánto y en qué medida, pero sí he perdido mucha capacidad auditiva. Escucho mucho menos que hace 20 años, a veces pido que me repitan las cosas o me lastima cuando las bocinas están en un lugar muy cercano a mí. ¡No escucho bien!", indica la cantautora.
El integrante de La Lupita Lino Nava, quien lleva 15 años como músico, asegura que el público responde mejor cuando el sonido está a su máxima potencia.
"Es un hecho que entre más fuerte está el volumen en un concierto, más se prende la gente. Lo importante es protegernos. En Estados Unidos hay reglamentos para que las bocinas en un show no excedan cierto nivel de decibeles, eso se debería implementar en los escenarios de México".
Tanto Alaska como Nava, Gustavo Cerati, Leonardo de Lozanne, Érik Rubín y Benny Ibarra, entre otros, pertenecen a la generación de músicos que conocieron los monitores de oídos hasta hace no más de 10 años, cuando ya habían iniciado su carrera. Para ellos, éstos fueron los salvadores de sus oídos.
"Ya cuando uno crece se da cuenta de que es muy importante la revisión médica y el cuidado del oído. Ya sea un músico o un aficionado, es de vital importancia detectar cuándo ya tus tímpanos están lastimados", señala Cerati, ex líder de Soda Stereo.
Érik y Benny, ex integrantes de Timbiriche, comentan que la tecnología ha ayudado a las nuevas generaciones a cuidar el oído, ya que los monitores de oído se hacen en un molde, a la medida de las cavidades de la oreja, y así aíslan por completo el sonido exterior.
"Se conectan a un aparato receptor y nosotros sólo escuchamos lo que viene en el 'ear monitor'. Así, desaparece el ruido externo y nos concentramos en nuestra propia señal", señala Benny.
"Es una ventaja en los conciertos porque te enfocas en tu propia voz, en el sonido de tu aparato. Intenté usarlos en teatro, pero como el sonido es más bajo, no me funcionó, porque no oía lo que los otros actores decían", afirma Érik.
Leonardo de Lozanne dice que la prevención es importante para que, cuando un músico o un fan de los...
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