No la derrumban, rescatan su belleza

AutorMariana Montes

La historia de muchos edificios y casonas antiguas en Monterrey y en otros municipios del Estado tienen dos tristes finales: o son derrumbados o los dejan "morir" con el abandono total y caen solos.

El adiós de estas viejas casonas deja en escombros vestigios de la arquitectura local y ecos de la vida diaria de los regios de aquellos años.

Sin embargo, el desenlace resultó diferente para la fachada marcada con el 1314 en la calle Luis Carvajal y de la Cueva, en la Colonia Terminal, porque mediante una restauración volvió al esplendor como cuando abrió su puerta en 1922.

"Seamos realistas. Hay gente que compra construcciones antiguas y, aunque les ponen trabas, las tiran porque no las comprenden ni se dan cuenta de que hay opciones para que se conserven", señala Selene Velázquez, restauradora encargada de la recuperación del frente de la casa de la Terminal.

La preservación del acervo cultural no está en conflicto con la funcionalidad, señala la también arquitecta, y ejemplo de ello es esta fachada que ahora da el toque antiguo y norestense a la casa de producción de la Panadería El Nuevo Nopal.

ARQUITECTURA LOCAL

Desde los muros de sillar de caliche hasta el conglomerado de mármol, los capiteles y los detalles florales, la construcción es ejemplo de la arquitectura norestense, indica Velázquez, también integrante de la empresa Restáurika.

"Domina el macizo sobre el vano, es una arquitectura austera pero bella", comenta. "Tienes el capitel que es una belleza porque está labrado sobre el sillar de caliche, que son bloques labrados de tierra fósil".

Velázquez encontró la fachada en pie, pero en mal estado. El resto de la casona estaba en ruinas. La restauración inició en septiembre del 2017 y se completó tres meses después.

"Utilizamos los materiales adecuados: se quitó un aplanado de cemento que en algún momento se puso y que no dejaba que el muro respirara. Se usó cal y arena (como se hacía hace décadas), además de pigmentos naturales en vez de pinturas acrílicas o vinil", expone la arquitecta.

"Para rellenar algunos huecos se utilizó ladrillos de milpa, los cuales se elaboran en Maravillas, en García, y se hacen de manera artesanal. Creamos un círculo virtuoso al comprarle los ladrillos a los artesanos".

VENTANA AL PASADO

Al portón de la renovada fachada llegan camionetas que cargan conchas, empanadas, bolillos y otras piezas de pan que elabora El Nuevo Nopal, nombrado en honor a El Nopal, una panadería emblemática en el pasado regio.

"Mi...

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