Su misión: vencer al cáncer
| Autor | María Luisa Medellín |
Lo que más le atrajo a Cynthia de la oncología médica fue la estrecha relación con cada paciente y su familia, ser una pieza clave en su vida y guía en un camino cada vez más esperanzador.
"Es que en oncología y cáncer de mama, que es mi subespecialidad, todo el tiempo hay avances, medicinas y tratamientos nuevos que permiten un pronóstico totalmente diferente al de hace algunos años", señala.
A Diana, una de sus jóvenes pacientes, le diagnosticaron cáncer de mama. En ese tiempo ella y su esposo intentaban tener un hijo.
Cuando acudió con Cynthia estaba deprimida porque quizá la enfermedad afectaría su fertilidad y, finalmente, se logró hacer una preservación de embriones antes de iniciar el tratamiento y las quimioterapias para que en un futuro no muy lejano cumpla su deseo de ser madre.
Otra de las razones de la oncóloga para enfocarse en este campo fue la posibilidad de desarrollar múltiples áreas de investigación. Ahí encontró su nicho.
"No soy la persona que está trabajando dentro de un laboratorio con células o fármacos. Mi trayectoria está más enfocada a la investigación clínica", detalla la especialista que no aparenta sus 40 años, y bien podría confundirse con una de las joviales residentes.
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Cynthia Villarreal Garza es hija de Gustavo Villarreal y María Teresa Garza. Es la mayor de tres hermanos y mamá de Natalia, una luminosa pequeña de 4 años.
De niña estudió piano y pensó en ser pianista, pero en la prepa no se decidía entre una carrera en relaciones internacionales o ser doctora.
Aunque sus amigas se ríen, Cynthia asegura que su interés por la medicina surgió al ver la película El Fugitivo, en la que Harrison Ford es un médico condenado a la pena capital por matar a su esposa, y antes de huir para probar su inocencia, socorre a los reos heridos del autobús que los traslada a prisión y que sufre un accidente.
Cynthia estudió Medicina en el Tec de Monterrey e hizo su servicio social en Investigación en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, en la Ciudad de México. Su tutor fue Julio Granados, inmunogenetista reconocido a nivel mundial.
En ese mismo instituto cursó las especialidades en Medicina Interna y Oncología Médica.
"En Medicina Interna traté a enfermos de cáncer, y el doctor Óscar Arrieta, un maestro que ha sido ejemplo para mí, y que es un renombrado oncólogo en México y el extranjero, me empezó a enseñar y a compartir artículos para dar la mejor atención a mis pacientes.
"Me gustó...
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