En memoria a ellos...
| Autor | Ismael López |
En el 2002, el futbol mundial tuvo sus momentos de gloria y alegría, pero también de lamento y tristeza, ya que la muerte le pegó duró, pues varias de sus leyendas dejaron de existir, para ocupar el lugar en la eternidad que ya tenían reservado.
Pronto llegaron los sentidos fallecimientos de legendarios futbolistas en el año que se fue. Ya que el 19 de enero, un paro cardíaco terminó con la vida de Edvaldo Izidio Neto, conocido en todo el mundo como "Vavá" y considerado uno de los jugadores más importantes en la historia del futbol brasileño. Contaba con 67 años de edad cuando falleció en la Clínica Sao Víctor, en la zona norte de Río de Janeiro, tras tres días de haber internado por una insuficiencia cardíaca, aunque su salud se había agravado desde que en el 2000 sufrió un accidente vascular encefálico, que lo dejó en silla de ruedas.
Este astro, quien fue el centrodelantero de la selección de Brasil en las conquistas de los Mundiales de Suecia 1958 y Chile 1962, nació el 13 de noviembre de 1934, en Recife, Pernambuco. Inició su carrera en el Sport de Recife, de su ciudad natal, para luego trasladarse a Río de Janeiro en 1954, al ser contratado por el Vasco de Gama, donde se consagró como jugador. Después militó en el Atlético de Madrid, de España, retornó a su país para jugar en el Palmeiras, luego estuvo en México, con el América y en Estados Unidos, con el San Diego Soccer, terminando su carrera en el Portuguesa de Río de Janeiro, en 1970.
Conquistó dos campeonatos cariocas con el Vasco da Gama y un paulista, con el Palmeiras. Era el clásico "matador del área", oportunista, con una buena técnica y dueño de una garra e inteligencia táctica poco común. Además, fue un buen rematador con la cabeza. Su vigor físico le valió el apodo de "Pecho de Acero".
Anotó nueve goles para Brasil en Copas del Mundo, convirtiéndose en el único jugador en marcar en dos Finales seguidas. En 22 juegos con la selección brasileña, concretó 14 tantos. Fue auxiliar técnico de Telé Santana en la selección verde-amarelha que disputó el Mundial de España 1982.
El futbol mundial, y en especial Brasil, todavía no se recuperaban del fallecimiento de "Vavá", cuando el 8 de febrero recibió otro duro golpe, al fallecer Thomaz Soares da Silva, mejor conocido como "Zizinho", también por problemas cardíacos, cuando contaba con 80 años de edad, ya que nació el 14 de septiembre de 1922, en Sao Gonzalo, Niteroi, un suburbio de Río de Janeiro.
Fue un crack fuera de serie, por su clase, talento y efectividad, que lo llevaron a ser él ídolo e inspiración de un niño que con el tiempo se convertiría en el "Rey del Futbol", de Pelé, quien dijo: "Zizinho fue el más grande jugador que yo vi jugar. Era un jugador completo, pues jugaba de volante ofensivo, que lo mismo marcaba y quitaba el balón, que creaba juego y definía, ya que era un excelente cabeceador y driblador como pocos. Además, hacia goles".
El fue uno de los jugadores más refinados del futbol de todos los tiempos. En la Copa del Mundo, a pesar de que Brasil perdió la Final ante Uruguay, él tuvo una actuación que muchos aseguran es la mejor que algún futbolista ha tenido con la selección "verde-amarelha", por lo que fue elegido como el Jugador de ese Mundial. Luciendo la camiseta número 10 varios años, lo que le permitió disputar 54 partidos y anotar 37 goles.
De niño su sueño era jugar con el América, su equipo preferido, pero cuando era un adolescente e intentó hacerlo realidad, fue rechazado por su físico delgado, siendo así como llegó al Flamengo, donde recibió la oportunidad de debutar por un accidente, ya que en un entrenamiento, al lesionarse el astro Leónidas da Silva, el técnico Flavio Costa lo puso en su lugar y el pequeño de Niteroi hizo de todo, con lo cual el técnico le dijo: Córtese el pelo y venga mañana", comenzando ahí una de las más brillantes carreras.
Rápido se manifestó como un jugador fuera de serie. Genial en el desarme del adversario y dueño de driblings increíbles y una visión de juego poco común. Se convirtió en uno de los héroes del tricampeonato logrado por el Flamengo en 1943, 44 y 45. Ya muy lastimado, salió del club rojinegro 10 años después de su llegada, cuando su pase fue vendido al Bangu por una fortuna, en medio de la tristeza de los seguidores del equipo, que lo idolotraban y en el país ya era considerado el mayor crack.
Su muerte provocó un duelo nacional en Brasil. Dejó para la posteridad, su figura y frases famosas, como cuando dijo: "La pelota tiene vida propia y le gusta ser tratada con delicadeza".
Luego, el 12 de febrero fue el futbol de Portugal el que se impactó al conocerse la muerte de José Travassos. Este interior izquierdo, surgido del Sporting Club, es considerado...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba