Jordania: Mosaico de civilizaciones
| Autor | Alessandro Triacca |
Fotos: Alessandro Triacca
Enviado
AMÁN, Jordania.- Jordania es un país joven, pero guarda uno de los bagajes históricos más extensos del planeta.
Aunque el Reino Hachemita de Jordania, nombre oficial del País, obtuvo su independencia en 1946, en el territorio que ocupa sucedieron los primeros capítulos de la Historia de la civilización.
Hace unos 10 mil años, el río Jordán y sus alrededores fueron parte del Creciente Fértil, la región histórica donde se descubrió la agricultura, que facilitó el establecimiento de las primeras comunidades sedentarias.
Desde entonces varios pueblos aquí habitaron y florecieron, desde los amonitas hasta los árabes, pasando por los nabateos y los romanos.
Estas civilizaciones dejaron a su paso un incalculable legado arqueológico y cultural que hoy constituye el mayor tesoro que Jordania puede mostrar a sus visitantes.
CAPITAL MILENARIA
Empezamos nuestro viaje en el norte, en Amán, la capital actual de Jordania.
Un taxi nos conduce cuesta abajo, hacia el Centro. En el trayecto observamos una inmensa propiedad que abarca buena parte del panorama: se trata del Palacio Real de Raghadán, residencia oficial de los reyes Abdalá II y Rania.
"Le tenemos mucho cariño a la Familia Real, porque son muy buenas personas", dice el taxista y nos señala con orgullo a lo lejos la gigantesca bandera negra, blanca y verde con la pirámide volteada y la estrella al centro, que se alza sobre la puerta norte del Palacio.
Pareciera que las curvas son la forma que define a la Ciudad: están presentes en el trazado caprichoso de las calles y en la ondulada grafía árabe de los anuncios y letreros.
Nos bajamos frente al gran Teatro Romano, testimonio bien conservado de la riqueza histórica de Amán, ciudad fundada hace más de 3 mil años como Rabbath-Ammon, el paraje bíblico de los amonitas.
Luego, tras el paso de asirios, persas y macedonios, formó parte del Imperio Romano bajo el nombre de Filadelfia.
El pasado se integra al presente de forma sutil aquí: las grandes columnas romanas sirven de portería a los niños que gustan de jugar futbol en la plaza del teatro, mientras sus madres los observan a lo lejos y platican entre ellas.
Nuestro guía comenta que hoy es día de descanso, pues la semana laboral en Jordania va de domingo a jueves. Eso explica por qué la plaza luce tan concurrida un viernes a mediodía.
Recorremos a pie las calles del Centro, tapizadas con varios locales comerciales donde se venden artesanías y ropa. En los cruceros hay que esquivar los autos con cautela, pues aquí los semáforos son tomados como mera sugerencia.
Resuena el llamado a la plegaria que apaga el bullicio del mercado, y las cabezas se vuelven en dirección a la mezquita Al Husseini, que se erige entre los edificios bajos del corazón de Amán.
Cae la tarde...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba