Opinión Invitada / Mario A. Zambrano Ábrego: Un Pacto con NL

AutorOpinión Invitada

El Pacto por Nuevo León pasó rápidamente de propuesta a tópico de jaloneo político.

Reza el proverbio que "el camino al infierno está empedrado de buenas intenciones". Tal vez la pregunta de fondo tendría que ser si requiere nuestra sociedad un Pacto por Nuevo León o un Pacto con Nuevo León.

La palabra "por" hace referencia a "la persona o la cosa a favor o en defensa de la cual se hace algo". La preposición "con" implica "compañía, adherencia, reciprocidad, comunicación con otros".

Nuevo León no requiere que las élites políticas y empresariales nos salven, lo que falta es que el ciudadano, la sociedad civil y las instituciones se fortalezcan para que presionen a los poderes fácticos de manera que la agenda de acuerdos y compromisos sea la de la generalidad, no la de grupos con intereses egoístas.

En este sentido, cualquier intento de pacto o acuerdo que materialmente deje al margen (por no decir que afuera) la voz y sentir del individuo, de las familias, de los diversos grupos sociales, de las Mipymes, sólo puede convertirse en una simulación. De eso la comunidad está cansada y harta.

La debilidad de la sociedad civil y la falta de compromiso de las élites con todo lo que Nuevo León representa ha permitido que hoy exista una crisis financiera riesgosa para todos los habitantes del Estado (sobre todo en caso de contingencias) y que persistan serios retos en materia de seguridad, en los que hay porciones de culpa atribuibles a los delincuentes, a la autoridad y, desde luego, también al ciudadano.

No hay solución inmediata; la expectativa de un mejor futuro para nosotros y nuestros hijos está en manos de quienes en la idea de un Pacto hoy no ven más que un capítulo de la caricaturesca política local.

Cuando exista un adecuado nivel de compromiso cívico, el ciudadano interiorizará que la lucha por la supervivencia a nivel partidos políticos desafortunadamente suele dejar mal parados los temas más trascendentes para la sociedad. Revertir esto implica que el pueblo se...

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