Info-Raíces / CUS, COS y CAS: ¿sirven de algo?

AutorLuis E. Montemayor Chapa

El arquitecto Paulino Decanini en una junta con urbanistas, autoridades y ciudadanos dejó caer como una bomba esta pregunta: ¿alguien me puede decir para qué sirven el CUS, COS y CAS?

Aun y cuando Paulino induce a que le respondamos ¡para nada!, se debe reconocer que estos coeficientes o tasas que relacionan las áreas construidas y el área del lote urbano se aplican en muchas comunidades mexicanas y extranjeras, incluyendo el Area metropolitana de Monterrey.

Dejando a un lado la ironía de mi pícaro amigo Paulino, se puede contestar que estas restricciones a los derechos civiles sobre la propiedad privada sí sirven actualmente para que en un plazo corto todas las casas sean iguales, todos los edificios de departamentos y oficinas sean iguales, con la misma altura, todo uniformemente repetido copiando el aburrido e inútil estilo arquitectónico soviético Stalinista.

Lo más preocupante es que estas ataduras a la creatividad y deseos individuales, así como el aprovechamiento de nuevos diseños y tecnologías para bajar el costo de la vivienda, nunca han sido práctica y realmente consensados con la ciudadanía (pocos saben qué quieren decir estas nefastas abreviaciones), no obstante que están en la Ley.

Las restricciones son obligatorias y modifican negativamente la calidad de vida de todos los ciudadanos de todas las clases sociales.

El CUS y COS aparecieron de repente en las Leyes Urbanas de Nuevo León promovidas en lo individual por el Dr. Roberto García Ortega, quien las descubrió en Francia.

El CAS (Coeficiente de Absorción del Suelo) seguramente fue copiado de la Ciudad de México (no de Francia), donde se requiere que las aguas de las lluvias sean "absorbidas" a través de la superficie y se inyecten al subsuelo, pues de no hacerlo, la Capital continuará hundiéndose por el descontrol de la extracción de los pozos.

Caso totalmente opuesto al de Monterrey, que no tenemos ese problema pero que sí sufrimos de escasez de agua por nuestras erráticas lluvias.

Lo que necesitamos en nuestra ciudad es que cuando llueva, el agua se conduzca a las presas El Cuchillo, La Boca y Cerro Prieto y que no se vaya al subsuelo para surtir los mantos acuíferos de Tamaulipas.

El CAS debe ser lo opuesto que en el DF, sin embargo, le copiaron los parámetros y se justifican alegando que esa agua se requiere para surtir los mantos acuíferos que abastecen a Monterrey, lo cual es un argumento insostenible técnicamente.

El CUS (Coeficiente de Utilización...

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