De la historia a la literatura

AutorDaniel de la Fuente

México tiene una larga tradición en lo que se refiere a libros sobre su historia, así como de novelas en las que vidas y episodios trascendentes en la identidad nacional son llevados con fortuna a la ficción.

Desde los libros en torno a la Independencia, de Ernesto de la Torre Villar; "México Bárbaro", reportaje determinante sobre el México de Porfirio Díaz, a cargo de John Kenneth Turner; los libros sobre la Revolución Mexicana de John Womack, pasando por la monumental biografía de Pancho Villa, a cargo de Friedrich Katz y la "Biografía del Poder", de Enrique Krauze, por mencionar sólo algunos, México puede jactarse de tener uno de los más amplios repertorios de estudios en torno al pasado.

Y aun así quedan huecos por llenar.

Por ello, la ficción se ha colado a la historia con resultados afortunados. El propio Krauze ha escrito que entre lo que tiene más presente del matrimonio entre verdad y ficción se encuentran "Noticias del Imperio", novela magna de Fernando del Paso; la obra de Enrique Serna sobre Antonio López de Santa Anna ("El Seductor de la Patria") o la reciente de C.M. Mayo: "El Último Príncipe del Imperio Mexicano", acerca del nieto de Iturbide en la corte de Maximiliano.

En entrevista, el propio Serna habla sobre la historia escrita por los novelistas.

¿Cuáles han sido los títulos que le llamaron la atención antes de ser considerado autor de novela histórica?

"Las novelas de Martín Luis Guzmán, que dejó los mejores frescos históricos de la Revolución y de las luchas fratricidas entre los caudillos posrevolucionarios. He releído varias veces 'La Sombra del Caudillo' y no cesa de fascinarme.

"La segunda mitad del siglo 20 ha sido también una buena época para la novela histórica mexicana. 'Noticias del Imperio' es, sin duda, una obra destinada a perdurar en el gusto de los lectores".

Serna considera que los historiadores suelen sacrificar en sus obras la tensión narrativa en aras de la erudición.

"Es más fácil que un narrador se improvise como historiador, que transformar en buen novelista a un historiógrafo ansioso por exhibir todos sus conocimientos en un texto literario".

¿Qué le llevó a escribir sobre Santa Anna? ¿Qué retos implicó "El Seductor de la Patria"?

"La fascinación por los antihéroes y el deseo de explorar el mundo interior de un personaje satanizado por la historia oficial. El reto fue dramatizar las circunstancias de la actuación política y militar de Santa Anna, lo que implicaba no sólo reconstruir su alma, sino...

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