Grave problema

AutorAlberto Armendáriz

Corresponsal

RÍO DE JANEIRO.- Más allá de los estadios, la otra preocupación de cara al Mundial es el transporte y la movilidad urbana, además de las telecomunicaciones.

Para la Confederaciones los temores son menores: se espera un público de 335 mil personas, la mayoría brasileños, acostumbrados a lidiar con los percances típicos para desplazarse por su país.

Pero para el Mundial, se estima que el número de visitantes extranjeros llegue al millón, mientras que los brasileños superarán los dos millones de participantes. Y ni los aeropuertos ni los sistemas de transportes de las ciudades-sede están preparados; las quejas por demoras y las precarias condiciones de las terminales aéreas son cotidianas, así como los embotellamientos y la falta de transporte público eficiente.

Aunque a principios de año el Gobierno de la Presidenta Dilma Rousseff entregó en concesión privada la gestión de aeropuertos de Brasilia, Sao Paulo, Campinas y Natal, las licitaciones para ampliar y modernizar las terminales de Río y de Belo Horizonte...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR