El más grande ballet master
| Autor | Mariana Montes |
Tras los famosos pasos de "El Lago de los Cisnes", "La Bella Durmiente" y "Don Quijote" se encuentra un mismo genio creativo: Marius Petipa, el llamado "padre de la danza clásica" .
Este reconocido ballet master nació hace 200 años, el 11 de marzo de 1818 en Marsella, Francia, y aunque murió en 1910 su legado continúa mediante las coreografías que están basadas, inspiradas o reconstruidas de su trabajo original.
Petipa es tan influyente en el arte de la danza que el famoso coreógrafo ruso George Balanchine lo calificó como "el más grande de todos los maestros".
Y es que la conexión entre el francés y el baile se vislumbraba desde la infancia, pues era hijo de una familia dedicada a las artes, asegura Laura Hormigón, doctora en musicología y autora del libro Marius Petipa en España, 1844-1847: Memorias y Otros Materiales.
El joven Marius, aunque inició su formación como bailarín en Bruselas, se sintió más atraído por la música y hasta combinó sus estudios de violín con la aparición en los ballets montados por su padre, Jean Petipa, asegura la autora.
No obstante, el trabajo por el que es recordado se gestó en Rusia, donde fue bailarín, coreógrafo y premier ballet master del Ballet Imperial, hoy conocido como el Mariinsky de San Petersburgo.
Los maestros de danza clásica Alejandro Jáuregui y Alejandra Martínez explican por qué Petipa es una de las grandes figuras del arte.
DEL BALLET ROMÁNTICO AL CLÁSICO
La frase "danza clásica" toma significado con el trabajo de Petipa, coinciden los especialistas.
"Los llamados ballets románticos de la época tenían una fuerte presencia de pantomima, sumamente teatral", afirma Martínez. "De aquí se hace la transición al ballet clásico, más corporal, donde se exploran nuevas formas de moverse con gracia y precisión. Petipa era un genio para esto".
El coreógrafo también es el creador de la llamada "fórmula" o estructura del pas de deux que incluye el adagio o baile lento a cargo de la bailarina y el bailarín, las variaciones de los intérpretes y la coda, afirman Jáuregui y Martínez.
"Él le dio fuerza al trabajo de los bailarines y del cuerpo del baile", expone Jáuregui. "Todo debía tener la misma perfección y la misma importancia".
Su talento y la creatividad también radica en la comprensión de las características de los personajes, mismas que se traducen en los trazos, asegura el maestro.
Esto quiere decir que la danza de un personaje que es campesino no luce igual a los pasos de un...
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