GLOSAS MARGINALES / Sigue la tragedia griega
| Autor | Everardo Elizondo |
El 8 de marzo G.A. Papandreou (GAP), Primer Ministro de la República Helénica, pronunció un discurso en The Brookings Institution -un "think tank" muy importante de Estados Unidos. La alocución ("poderosa", según uno de los anfitriones) se llevó a cabo un día antes de que GAP se reuniera con el Presidente Barack Obama, en una más de las entrevistas del Primer Ministro con líderes mundiales, como parte de su esfuerzo por sumar apoyos en favor de Grecia. Dicha nación, como se sabe, está sumida en la crisis económica más grave desde la Segunda Guerra Mundial.
GAP asumió el poder apenas el pasado mes de octubre del 2009. Y se encontró con una sorpresa muy desagradable: el déficit del sector público, como fracción del PIB, era de hecho el doble del informado por el Gobierno anterior al mercado financiero, a las autoridades europeas y al propio pueblo griego. En consecuencia, según reconoció GAP, la confianza de los inversionistas (tímidos como son, acoto yo) se desplomó, y ello condujo incluso a un debilitamiento del euro.
Como es usual en estos casos, Grecia tuvo que adoptar un plan de estabilización de emergencia, que incluye los ingredientes estándar: aumentar los impuestos, reducir el gasto público, trasparentar las operaciones gubernamentales, solicitar ayuda externa, etcétera. La tarea no es sencilla.
GAP ha ofrecido bajar el déficit público de algo así como 12.7 por ciento del PIB el año pasado a "sólo" 8.7 por ciento en 2010 y, más todavía, llevarlo al 3 por ciento -que es la norma de la Unión Europea- en 2012. Se trata, obviamente, de un esfuerzo colosal. Para el caso, se pretende incrementar la recaudación tributaria atacando la evasión, la cual, a juicio de GAP, es enorme. Se quiere también reducir la corrupción, que al parecer está extendida a todos los niveles del Gobierno. En cuanto a la trasparencia del gasto público, se ha establecido publicar on-line cada gasto gubernamental (!) -una primicia en Europa, enfatiza GAP.
El Primer Ministro aprovechó el foro para señalar, con sentido de prevención, que aunque el PIB de Grecia es sólo el 2 por ciento del PIB de la Unión Europea, el agravamiento de sus problemas podría acarrear perjuicios de consideración no únicamente a la región, sino también a Estados Unidos. Por ejemplo, dijo, si el euro se devaluara frente al dólar, ello significaría una pérdida de capacidad exportadora para la economía estadounidense.
Sabemos, agregó GAP, que los problemas de Grecia son estructurales, esto es...
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