Las glorias de Nuevo León

AutorJulieta Rodríguez

Desde el Cerro de la Silla, las montañas, la Hacienda San Pedro, el Cerro del Potosí, la Presa de la Boca, el Pozo del Gavilán, las Grutas de Bustamante, las de García y de todititos aquellos lugares que forman a Nuevo León, se ve lo atractivo que es esta región.

Pero también existe la riqueza de sus atractivos gastronómicos, que convierten a este estado en un lugar sabrosamente explorable.

A todo lo largo y ancho de este pedazo de tierra se puede saborear lo tradicional de cada región, que conforma la gastronomía típica nuevoleonesa, como un buen machacado, asado de puerco, hojarascas, fritada, dulces de leche, panes, cabrito, empalmes, glorias, pan de elote, chorizo, las conservas de naranja, chile piquín y cuajitos, entre otros.

La carne seca de doña Lencha, quien era originaria de Ciénega de Flores, es una de las riquezas que se han heredado al mundo, pues es muy común que visitantes la lleven hasta otras tierras para disfrutarla como tradicionalmente se hace aquí: con huevo, tomate, cebolla y chile.

Este es uno de los platillos que los habitantes de esta región más disfrutan en el desayuno, acompañándolo con tortillas de harina bien calientitas.

En 1926, Fidencia Quiroga, llamada cariñosamente Tía Lencha, creó este manjar al freír la carne seca en pequeños trozos y combinarla con huevo y una salsa, para darles de desayunar a los trabajadores que construían la Carretera Nacional.

También de la región del noreste del Estado surgieron los empalmes, que son dos tortillas untadas por ambos lados con manteca de puerco, que van...

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