Gerardo Puertas Gómez / Mieles del poder
| Autor | Gerardo Puertas Gómez |
Lo que va de ayer a hoy. Tal expresión viene a mi mente cuando pienso en el Partido Acción Nacional.
¿Recuerda usted las épocas cuando ser militante albiazul era símbolo de valores cívicos? Así eran las cosas en México hace algunos años.
¿Qué sucedió con las y los paladines de las causas ciudadanas que luchaban por las libertades políticas?
Hoy no son pocas las personas con filiación panista que están dando mucho de qué hablar.
Va, a vía de ejemplo, una noticia publicada durante los últimos días en las páginas de este periódico.
El Comité Ejecutivo Nacional del PAN en Nuevo León autorizó celebrar negociaciones con el Partido Nueva Alianza, con vistas a una posible coalición electoral para los comicios de julio de este año (EL NORTE, 13 de enero del 2009).
Con fundamento en tal acuerdo, Acción Nacional podría acercarse con los dirigentes aliancistas, a fin de fijar las bases para registrar un candidato común a la titularidad del Poder Ejecutivo de la entidad.
¿Por qué me parece reprobable la celebración de semejante convenio de carácter interpartidista?
La razón es evidente. El Panal ha estado impulsado, desde su nacimiento, por uno de los personajes más conspicuos del autoritarismo mexicano.
Me refiero a la profesora Elba Esther Gordillo, líder máximo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
Ella, surgida a la sombra del exdirigente magisterial Carlos Jongitud Barrios, no vaciló en traicionar su confianza a objeto de tomar el control de la organización laboral.
Ella, dirigente del Partido Revolucionario Institucional, no tuvo empacho en olvidar la fidelidad a su militancia con el propósito de apoyar la constitución de otra formación política.
¿Cómo es posible que el PAN esté ahora dispuesto a coaligarse con un personaje de tales antecedentes, con el único propósito de alcanzar unos cuantos votos más para su abanderado?
Esa acción se suma, desde luego, a la resolución adoptada el mes pasado por el Comité Directivo del Partido Acción Nacional en Nuevo León, en el sentido de optar por seleccionar mediante la exclusiva participación de militantes y de adherentes a quien habrá de ser su candidato a la Gubernatura (EL NORTE, 12 de diciembre del 2008); sin hablar ya de los múltiples episodios de corrupción protagonizados por funcionarios de esa misma extracción que forman parte de la Administración pública municipal de Monterrey.
Manuel Gómez Morín, fundador del PAN, fue un ciudadano ejemplar. Él, como muchas mujeres y como muchos...
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