FRICASÉ / Fatídica obsesión
| Autor | El Abogado del Pueblo |
Hay, amigos, de obsesión a obsesión: por un lado tenemos la "Magnífica Obsesión", premiada novela que generó DOS excelentes películas y una serie de televisión, escrita en 1929 por Lloyd Douglas.
Misma que se convirtió en 1935 en gran película estelarizada por Irene Dunne y Robert Taylor, drama que casi 20 años después volvió a la pantalla con Rock Hudson y Jane Wyman rompiendo récords de taquilla.
Esta obsesión magnífica tiene como impulso central la reparación del daño: la obsesión de un hombre en esforzarse por restituir a su víctima lo perdido a causa del daño colateral por él causado accidentalmente, entregándose para ello vida y alma en convertir su remordimiento en acción concreta a favor de quién él dañó inadvertidamente.
Por otra parte, "Fatídica Obsesión" es la que tiene el Presidente norteamericano, Donald Trump, con su famoso MURO.
Este señor no sigue ningún noble impulso para hacer el bien: todo lo contrario, lo que pretende es causar daño topen chivas y chillen llantas.
Nada ni nadie le importa al Sr. Trump con tal de salirse con su capricho, ni siquiera llevarse de encuentro las propias LEYES norteamericanas.
El recurrir a declarar una "emergencia nacional" para así apropiarse de los fondos de desastre y con ellos iniciar la construcción de su barrera de obstrucción, que ahora a juzgar por los trabajos que se efectúan no es ni muro ni muralla, sino simple REJA, contraviene todo sentido de decencia y legalidad.
La declaración de "emergencia" es en Norteamérica una facultad presidencial que se refiere ÚNICA y exclusivamente a DESASTRES NATURALES: esto es, huracanes, inundaciones, incendios, tornados y etcétera.
Lo que Trump ha hecho es inaudito: INVENTAR literalmente una "emergencia" en la frontera, que no existe, que le sirve de pretexto para apropiarse del fondo de emergencia y emplearlo a su discreción para levantar, o extender, su reja.
Seguramente así lo piensa este alocado Presidente que asemeja, literalmente, lo que en su país llaman "a bull in the China shop": o sea, algo parecido a introducir un toro en una tienda de cristalería.
Tal acción garantiza que algo se romperá: así es Trump, a lo que se mete lo rompe o echa a perder.
Este señor no sabe construir, ni en el sentido humano ni en el sentido material: su inclinación natural es inventar pleitos, conflictos y enfrentamientos.
Su comportamiento claramente...
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