Filtra el calor
| Autor | Alicia Díaz |
La vegetación puede ser un elemento natural que te ayuda a filtrar el calor de tu vivienda para conservarla confortable.
Un árbol mediano o grande da sombra densa y ayuda más que un aislante artificial a mantener tu casa fresca, asegura Gonzalo Villarreal.
El especialista de la empresa Ciénega Asterión recomienda colocar árboles de crecimiento rápido o moderado.
Entre ellos destaca el encino bravo, el encino blanco o la anacahuita en áreas donde el sol se proyecta más tiempo en tu propiedad.
"Conservar fresca tu casa con una buena sombra hace que enciendas menos tiempo el aire acondicionado.
"Incluso puedes mojar las hojas de los árboles de forma moderada para que con el aire de la noche refresque más tus paredes y ventanas", aconseja.
Villarreal sugiere buscar un buen espacio donde pueda crecer la planta.
Ésta se debe cortar de tal forma que cubra el espacio que necesitas proteger, precisa.
"Si nuestro techo tiene la estructura como para soportar una maceta grande, también podemos colocar arbustos pequeños que nos sirvan de aislante, como el cenizo.
"Estos árboles son regionales, así que requieren poca cantidad de agua".
El follaje de los árboles acumula humedad, la cual refresca el aire que se filtra entre sus ramas, coincide Oswaldo Zurita, de Ecotono Urbano.
La proyección de la sombra, agrega, provoca que al pasar bajo un árbol se registre un cambio en la sensación térmica.
El experto destaca que es importante seleccionar de manera correcta las especies y su ubicación alrededor de la casa o edificio.
"Si bien un árbol con follaje denso filtrará y refrescará el aire, es necesario que para recibir todo este beneficio lo plantemos en el camino de las corrientes dominantes", expresa.
En Monterrey, precisa, el aire contaminado y caliente normalmente fluye de sureste a oeste y noroeste.
Por ello, normalmente hay más contaminación en la zona poniente de la Ciudad.
Santa Catarina, Escobedo y el poniente de Monterrey son los más afectados por la polución.
Las barreras de árboles ayudan no sólo a inyectar humedad y frescura al aire, sino que filtran sus partículas contaminantes.
Villarreal, de Ciénega Asterión, dice que para ahorrar electricidad se deben ubicar los árboles entre las corrientes de aire y la casa.
Así se convierte el follaje en un filtro natural que inyecte humedad y reduce la temperatura del aire antes de entrar al hogar.
El árbol se utiliza como barrera física entre los rayos del sol, en las horas más...
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