Hay fiesta en el infierno

AutorFrancisco Esquivel y Sineli Santos

MÉXICO.- El Estadio Alfredo Harp Helú por fin encendió su diamante de fuego.

Las puertas del averno se abrieron para recibir a cerca de 20 mil almas, quienes anoche pintaron de rojo el inmueble y presenciaron la derrota de la novena escarlata por pizarra 11-2 ante un equipo de prospectos de Padres de San Diego.

En medio de aplausos y abucheos, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador fue el encargado de lanzar la primera bola, después de un discurso en el que volvió a referirse como "fifís" a quienes no estaban con él, y en el que reiteró el apoyo a todos los deportes.

La reacción a las palabras del propietario Alfredo Harp Helú fueron distintas. Todos aplaudieron al presidente del equipo que cumplió el sueño de tener un estadio completamente de beisbol a los aficionados a la pelota caliente, algo que no gozaban desde el siglo pasado con el Parque Delta.

El pitcher escarlata Arturo López fue el centro de atención cuando lanzó la primera bola y los presentes se rindieron ante su lanzamiento.

Mientras los prospectos de Padres de San Diego se lucían en la lomita, el infierno estalló con la primera carrera en la historia del inmueble de Diablos, que fue por cortesía de Armando Araiza.

Eso sí, aunque el rival cada vez se crecía y anotaba carrera tras...

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