Felipe Díaz Garza / No somos bicicletas

AutorFelipe Díaz Garza

Mal hace el Presidente del PRI de Nuevo León, Álvaro Ibarra, al no levantarse, como piedra romana en rebelión por el traidor asesinato de Julio César por Bruto y los suyos, cuando uno de los propios de Álvaro, el dirigente cenopista y diputado local Héctor García, amenaza a otro priista tan o más distinguido que ellos dos, Abel Guerra Garza, con expulsarlo del tricolor por criticar al Gobierno priista de Rodrigo Medina.

Abel ha criticado severamente a este Gobierno, específicamente por su actuación en el tema del combate a la delincuencia organizada. El doblemente ex Alcalde de Escobedo ha propuesto, incluso, que él mismo hubiera hecho mejor las cosas si hubiera sido Gobernador, para lo que compitió y perdió en la elección primaria contra Rodrigo.

Lo cierto es que no hay "hubiera" que valga en la administración pública y en la privada y en la doméstica y en todos los giros humanos. "Si mi tía hubiera tenido ruedas, hubiera sido bicicleta", decíamos burlonamente de chamacos cuando alguno salía con "si hubieras".

Con esto quiero decirle que no sabemos y quizás no sabremos nunca cómo hubiera sido el hoy si el ayer hubiera sido diferente a lo que fue. Si Abel Guerra o Fernando Elizondo hubieran ganado, sólo Dios sabe, si acaso, cómo hubieran sido las cosas, aunque francamente no creo que hubieran sido distintas, pues el poder del crimen organizado, cuyos efectos sobre nosotros es el tema que hoy nos preocupa tanto, supera en todas partes al poder del Estado.

Extiendo la referencia al maltratado Estado mexicano y no la limito conculcatoriamente a su maltratada extensión nuevoleonesa. Sólo Dios sabe, pues, cómo hubieran sido las cosas si cualquiera de entre Andrés Manuel López Obrador o Santiago Creel o Roberto Campa hubiera sido Presidente de México y no Felipe Calderón. Ninguno de ellos es bicicleta, aunque ruede.

Pero, igual que los oponentes que fueron de Calderón lo hacen, algunos hasta con inteligencia y valor, Abel Guerra tiene libertad, y derecho para ejercerla, de criticar al que le ganó la Gubernatura, especialmente si lo hace con nombre y apellido, tanto del crítico como del criticado, como el ex Presidente estatal priista y doble ex Alcalde de Escobedo acostumbra hacerlo.

Le digo, pues, que Ibarra hace mal al no descalificar y hasta...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR