Una fantasía llamada GTO

AutorAlberto Bortoni

Una imagen cinematográfica marcó el 2001. David Aames, el heredero de una gran compañía editorial y personificado por Tom Cruise, sale de su departamento en Manhattan y saca de la cochera un Ferrari GTO pintado en un tono muy obscuro.

El auto luce espectacular en las calles de Nueva York que, curiosamente, están completamente desiertas. Pero David, personaje del filme "Vanilla Sky", estaba soñando. Todo era una fantasía, algo falso. Exactamente como el GTO usado en la película.

El Ferrari GTO, de hecho, se trata de uno de los coches más codiciados del mundo. La fabricante italiana produjo 36 ejemplares entre 1962 y 1964. El objetivo era venderle la idea a la Federación Internacional de Automovilismo de que éste era una continuación del 250 SWB y así cumplir con el requisito de fabricar 100 ejemplares de producción, necesarios para competir en las carreras de Grand Touring.

Hoy en día, el 250 GTO tiene el título de ser el auto más caro que se ha vendido en una subasta. En 2018, uno estos vehículos fue vendido en Monterey por RM Sotheby's por 48.4 millones de dólares.

El 250 GTO que apareció en "Vanilla Sky" también se intentó vender en Monterey por Mecum, otra casa de subastas. Sin embargo, la puja máxima fue de 60 mil dólares.

La diferencia en precio está en que el GTO de la película es en realidad una réplica fabricada por Joe Alphabet, la cual es llamada Alpha One GTO. Joe Alphabet compró los moldes para hacer el GTO de Barry Goldstein de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR